Comenzamos un nuevo año. Las predicciones están a la orden del día. Los planes, los propósitos y las mejores intenciones de hacer nuevas cosas se convierten en el alimento que llena a todos los profesionales por estos días; por supuesto la industria del BTL no se queda atrás.
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Vemos muchas oportunidades para este nuevo año; oportunidades que tiene que ver con la alianza cada vez más fuerte que debe haber entre las acciones BTL y las digitales. Si bien las primeras deben generar experiencias reales, vividas a través de los sentidos, las acciones digitales, ayudan a multiplicar los impactos a numerosas personas que no tuvieron esa experiencia real, pero esa réplica dada por los que si la vivieron es suficiente para creer y conectarse con la marca, con el producto, el concepto y su promesa.
Ejemplos se ven muchos, pero las estrategias BTL tienen que comenzar a involucrar el poder digital, para multiplicar sus experiencias; experiencias que tendrán que apalancarse en las emociones, en los recuerdos, en la capacidad de traer al presente lo que se ha vivido en el pasado…
Vemos muchas oportunidades, si contamos con clientes decididos a medir el número de impactos, como resultado de una sumatoria de acciones que involucren varios escenarios… el punto de venta, la calle, los efímeros, los digitales e incluso los medios masivos. Oportunidades que comenzarán a darle al BTL los nuevos pasos que necesita para su evolución, que sin duda está íntimamente ligada a las tendencias de compra de los consumidores, a los nuevos escenarios que adopte para adquirir sus productos, a las nuevas condiciones que las grandes superficies, espacios comerciales e incluso las ciudades mismas, impongan para comercializarse.
Vemos muchas oportunidades en los mismos consumidores que están dispuestos a adueñarse de las propuestas que se sintonicen con sus gustos y sus grupos sociales, y que estén dispuestas a ser transformadas por ellos mismos para crear nuevas experiencias.
Vemos muchas oportunidades en las nuevas realidades de nuestros países, que poco a poco van dando origen a sociedades transformadas, dispuestas a ser parte de los cambios que enfrentan y de los que son protagonistas.
Las oportunidades del BTL siempre serán nuevas y variadas, porque mientras exista oferta de productos y servicios y una demanda de consumidores dispuestos a adquirirlas, las estrategias BTL encontrarán un escenario para que esos consumidores diferencien toda la oferta a través de la experiencia.