Las oportunidades que han encontrado las marcas estadounidenses para crecer han tenido dos vías: el comercio electrónico o la creación de espacios que ofrezcan una experiencia de marca.
Si comparamos al consumidor estadounidense con el mexicano es muy distinto. En primer lugar porque opta por realizar compras en línea con mayor frecuencia, y segundo lugar, porque está dejando de lado la visita a establecimientos físicos, en especial cuando se trata de productos que puede conocer a detalle en línea y, posteriormente, asistir al punto de venta para efectuar la transacción.
Macy’s, Amazon GAP, Nordstrom, Kohls, Walmart, Victoria’s Secret, JC Penney y Zulily son alguna de las tiendas online que han ganado un mayor terreno en la preferencia del consumidor estadounidense. Datos de Statista apuntan que Macy’s registró ventas aproximadas a los 4 mil millones de dólares en 2019, una cifra superior al líder del e-commerce Amazon que logró 2.5 mil millones de dólares.
Las ventas minoristas en 2019 registraron una caída de 0.6 por ciento. En diciembre, las ventas en el mercado estadounidense registraron una alza del 0.1 por ciento, según datos de United States Census Bureau. Al cierre de año, las ventas de retail en Estados Unidos registraron un crecimiento interanual del 3.6 por ciento.
Sin embargo, estas cifras no cambiarán si no se realizan los ajustes necesarios en las estrategias para lograr un mayor crecimiento en el sector de la moda, y el comercio electrónico es la clave.
Una investigación realizada por Casaleggio Associati muestra las medidas adoptadas por las compañías para incrementar su valor en el mercado del comercio electrónico. Según el 30 por ciento de las compañías encuestadas, la digitalización e innovación tecnológica fue la principal medida que adoptaron para lograr un crecimiento, seguido de mejorar la experiencia del usuario en su plataforma de e-commerce (15 por ciento) y contar con presencia internacional (13 por ciento).
Te recomendamos: