Haciendo alusión a “Los caballeros las prefieren brutas”, serie de televisión que evidenció un segmento machista, dándole el toque de glamour que pareciera otorgarle un permiso para replicarse.
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Sin embargo hay conductas que no se repiten, algunas cambian, así como la moda en la ropa, los hábitos humanos migran según la evolución, estancamiento o rezago que se presente en la sociedad.
Algunas cosas que están regresando con un acento distinto nos colocan en una reinterpretación de la oferta de valor de las empresas y sus marcas. Por ejemplo, después de la ola de la salud y cosmética, ahora todos deseamos cuidarnos pero no de manera excesiva.
Como el caso anterior, una tendencia que esta apoderándose del mercado, es la del hombre que vuelca sus esfuerzos a la caballerosidad, la elegancia, el buen gusto y la cultura.
En Kingman, obra basada en el cómic The Secret Service, nos muestra el encanto de la tendencia que he citado previamente, en ella podemos ver una especie de evolución de James Bon.
La remasterización incluye adjetivos que con la fuerza del feminismo radical y la metrosexualidad, estaban en riesgo de sepultarse. Algunos de los más visibles son:
- La virilidad con clases, siendo una manifestación más de la estrategia que de la fuerza.
- Los modales como eje rector contra el mal.
- La caballerosidad como el estándar de lo correcto y como lo más sexy para las féminas.
- La cultura e inteligencia como un afrodisiaco indispensable en los varones.
- La tecnología como un complemento que se puede mezclar perfectamente con los aditamentos antiguos.
- La condición física y el reto como un elemento de masculinidad.
El regreso de la vieja escuela, no es retrogrado, es un anhelo por recuperar la imagen del hombre que sabe conducirse, vestirse y comportarse, por tanto las marcas deben estar atentas para cubrir la ola “royal”, recuerde que no solamente las damas los prefieren Kingsman, sino que los hombres están optando por convertirse en uno de ellos, están pasando a la sastrería.
Gracias por leerme, nos vemos a la hora del té.