El material POP constituye de todos los elementos destinados a promocionar una empresa para implementar una estrategia al interior del punto de venta.
Orientan al shopper sobre dónde está ubicado el producto en un supermercado, comunica usos, ventajas y beneficios de productos o servicios, entre otras funciones.
Es tan relevante que, de acuerdo con el Departamento de Investigación de InformaBTL, se invirtieron 58,181 millones de pesos en marketing BTL en México durante 2019. De dicha cantidad, el 9.1 por ciento (5 mil 294 MDP) se destina a acciones en el punto de venta, adicionalmente, para la generación y el montaje de material POP se destina el 1.8 por ciento del total, lo que es igual a mil 47 MDP.
La creatividad juega un papel determinante cuando se habla de estos elementos, pues puede ser la diferencia entre el éxito o el fracaso de la promoción.
Debe ser atractivos a la vista e informativos con elementos clave, sin que el consumidor se aleje conociendo el producto pero sin comprar, sino que deben resultar el gancho perfecto para acercarse a saber más.
Las mejores ejecuciones son las que dirigen al producto. Puede ser tan simple como colocar un diseño con estampas en el piso para destacar de los competidores y dirigir al producto en el estante, es el caso de esta genialidad de Nesquik.
Se localiza comúnmente en las cabeceras de las góndolas, en áreas de espera, puntos de demostración o degustación, estanterías, zonas con buena iluminación y en la línea de cajas, sobre todo en esta última. Este es el primer punto a considerar si no se quiere errar en la ubicación del material.
Puede ser algo tan atractivo como lo que hizo Coca-Cola para demostrar que su refresco era muy ligero.
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