El consumidor ha adoptado una mirada más crítica y consciente sobre su consumo. Las marcas también han acelerado la difusión de contenido a través de una estrategia de marketing social para informar al consumidor sobre los cambios que han realizado a sus productos con el propósito de favorecer el cuidado del ambiente.
Euromonitor International en su estudio Las 10 principales tendencias globales de consumo para 2019, señala que los consumidores se están volviendo más conscientes de su salud, lo que ha implicado el cambio de hábitos de consumo, pero no solo en alimentos, sino también en otras categorías.
El uso de productos más naturales es una de las respuestas en la industria cosmética. El desarrollo de un tubo cosmético de cartón es una de las innovaciones más recientes realizada por L’Oréal, firma que comprometida con la iniciativa New Plastics Economy de la Fundación Ellen MacArthur, con que pretende que el empaque de sus productos sea elaborado con plástico reciclado o comportable, así como que provenga de materiales reciclados para 2025.
De acuerdo con Philippe Thuvien, vicepresidente de Packaging y Desarrollo de L’Oréal, el objetivo de la compañía es realizar el primer lanzamiento de este empaque para productos de cuidado de la piel en el segundo semestre de 2020.
En la búsqueda de un envase más sustentable
Unilever es otra firma que ha apostado por impulsar la sostenibilidad en productos de consumo a través del envase. Según datos de la propia compañía, en el mercado mexicano ha alcanzado el uso de 90 por ciento de envases reciclables, reusables o compostales.
El objetivo de la compañía es que 100 por ciento de sus envases sean reciclables para 2025, sin embargo señala que México es uno de los mercados más importantes donde ha impulsado el tema de la sustentabilidad.
En 2018, se recolectaron más de 4 mil toneladas de plástico PET en alianza con la asociación civil Ecoce. En este sentido, el gran reto de la compañía es impulsar un ecosistema de economía circular con este tipo de material.
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