Es cierto, los hombres nunca entenderemos muchas cosas de las mujeres, y una de las más difíciles de entender es ¿por qué compran tantos zapatos? Los hombres normalmente tenemos cuatro pares de zapatos y uno o dos pares de tenis. Pero, ¿han visto cuantos pares de zapatos tiene su novia o esposa?
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El documental God save my shoes dice que si no se tienen al menos cinco pares de zapatos, no se es mujer. En promedio las mujeres tienen diez y nueve pares de zapatos, aunque en realidad solo utiliza cuatro. El resto son caprichos , adornos o trofeos que si tienen suerte usaran un día en algún evento social o fiesta especial.
¿Pero que es lo que hace que una mujer quiera tantos zapatos? El acto de la compra es lo más importante. Más allá del objeto en sí, el acto de comprar es lo que importa más. Es un acto totalmente egoísta.
Al momento de la compra la mujer se hace preguntas como ¿quién soy?, ¿a dónde voy? y ¿qué imagen proyecto? Al comprar se libera la dopamina, hormona que genera sensación de placer. Este acto produce un efecto anti depresivo y elimina ansiedades.
Pero hay que tener cuidado, por que a partir de 50 pares ya es considerado como una adición. Las mujeres con esta adicción suelen comprar zapatos a escondidas e incluso dan prioridad a los zapatos sobre sus seres queridos. No solo se trata de comprarlos, si no de tenerlos nuevos, este desorden es llamado Neofilia u obsesión por lo nuevo.
Otra de las razones es que al llegar a la edad adulta el tamaño de nuestro pie no cambia; situación que le encanta las mujeres al momento de ir de compras, ya que saben que aunque hayan subido un poco de peso los zapatos siempre serán de la misma medida.
Cuando las mujeres usan tacones se sienten más altas y estilizadas, lo cual eleva su autoestima. Al sentirse más altas se sienten más importantes y poderosas, pues la altura siempre se ha relacionado con autoridad y poder.
Los tacones tienen connotaciones sexuales tanto para hombres como para mujeres, ya que entre más altos sean más se tienen que mover las caderas al caminar.
Por todas estas razones los zapatos se han vuelto una prolongación del cuerpo de las mujeres, debemos de tratar de entenderlas y no juzgarlas cuando compran tantos zapatos. Además aceptémoslo, ¿que mujer no se ve guapa con un par de tacones altos?