La palabra Estrategia, ha sido una imprescindible en mi día a día como experta en marketing. Algunos la toman a la ligera, otros sabemos la profundidad que encierra la palabra en sí, y también sabemos que no es ningún juego.
Pero pensándolo bien me parece que sí es un juego….. un juego estratégico, como el inteligente juego de ajedrez.
El ajedrez es un juego milenario, los expertos historiadores aún debaten sobre su origen, la versión que ha tenido la mayor aceptación es que surgió en Asia, muy probablemente en la India, a partir de ahí llego a China, Rusia, Persia y finalmente a Europa, en donde se establecieron la reglas del juego que rigen hasta la actualidad.
El mundo corporativo es un enorme tablero de ajedrez, las compañías de un mismo giro son competidores y cada una ocupa su lado en el tablero, con un solo objetivo en la mente: Dar jaque mate al Rey de su adversario.
El momento de estar frente a frente con nuestro adversario es crucial para desarrollar una estrategia de marketing exitosa.
Evidentemente el ganador es quien haga los mejores movimientos, con todas sus piezas (integrantes de su equipo,) además ya han analizado su entorno, los movimientos de su competencia y las oportunidades abiertas para poder avanzar y llegar al tan anhelado jaque mate, en el terreno de marketing, el juego ajedrez se compara con una estrategia de marketing global y de 360 grados, que incremente la participación de mercado, el posicionamiento de la marca, la preferencia y lealtad de los clientes y que reditúe en ganancias para la compañía.
Para sumergirnos en este interesante juego, me gustaría hacer una analogía de las piezas que forman el ajedrez y que pueden ser comparadas con el organigrama corporativo.
Cada pieza tiene una función específica y con cada movimiento, se logra avanzar en el tablero.
Las piezas del ajedrez en el mundo corporativo
El Rey – Está representada por la Marca.
Es muy probable que se piense que el Rey es la pieza clave del tablero, se considera la más valiosa aunque no la más estratégica, porque tiene movimientos limitados, si la capturan se gana el juego o se pierde, según del lado del tablero donde te encuentres. Su poder radica en el apoyo que le brindan las demás piezas de la estructura organizacional, especialmente el apoyo de la Dirección de Marketing.
La Dama o reina – Representada por la Dirección de Marketing
Ella es realmente la pieza más poderosa del tablero, administra el presupuesto de marketing, tiene en sus manos los recursos que le permiten dar movimiento a la estrategia, cada paso que da es respaldado por un gran análisis, es el mayor influencer del Rey y es capaz de tomar los riesgos y decisiones para lograr el éxito de la marca.
Se dice que los jugadores no deben enemistarse con la Dama, porque debido a su gran poder e influencia puede desatar una gran tormenta.
Las Torres – Dirección de Finanzas y Dirección de Operaciones
Ellos pueden otorgar los elementos que dan una mayor fuerza a la estrategia de la Dama, crean alianzas dentro y fuera de la empresa, su mayor alianza es la que pactan con la Dama porque en sus manos está en llevar a otro nivel la dirección que tomará la compañía con el apoyo de las Torres.
Los Alfiles – Clientes, distribuidores y mayoristas del producto o servicio de la compañía.
Imprescindibles piezas del juego, ellos eligen nuestro producto o servicio sobre el de la competencia, tienen el poder de encumbrar una marca o de eliminarla del panorama. Hacen alianza con los Peones y la sellan con la Lealtad, que a largo plazo es un lazo indestructible que genera el revenue de la compañía.
Los Caballos – Dirección de Relaciones Públicas.
Ellos se encargan de llevar más allá de las fronteras la reputación de la marca, establecen comunicación estratégica, lazos con medios, son la voz de la compañía y tienen la capacidad de formar un escudo en situaciones de crisis, cuando una compañía tiene el caballo ideal su llegada al éxito está asegurada.
Los Peones – Equipo de Gerentes de Ventas.
Ellos tiene fama de ser los más populares, adquieren un poder de crear alianzas a través de la perseverancia. Otorgan y reciben apoyo incondicional de su red de contactos, son expertos en su segmento y producto. Todas esas cualidades son una muestra de su gran destreza para el cierre de las ventas, lo que lleva a la compañía a superar el logro de sus objetivos en muchas ocasiones.
Es sumamente enriquecedor saber cómo el juego estratégico del marketing tiene los principios del ajedrez, es un juego de análisis, de paciencia, y de generar alianzas. Todo eso se lleva su tiempo, para asegurar el éxito de una estrategia marketing no debemos precipitarnos, es vital permanecer atentos, monitorear movimientos, medir resultados y eso nos muestra de una manera orgánica y transparente, cuál será nuestro siguiente paso para coronarnos con el éxito.
Con esta perspectiva, podemos mover todas las piezas de nuestro tablero, fortaleciendo nuestro análisis del entorno y nuestra estrategia, avanzando con pasos firmes hacia el éxito y diciendo con cada campaña existo un sonoro ¡¡Jaque Mate!!
