A finales de 2023, la producción de autos global ascendió a 94 millones de vehículos, según Statista, tendencia que para el año entrante irá a la alza no solo por la movilidad perse, sino también por los diferentes hábitos de compra y necesidades de las personas que están en busca de un nuevo automóvil. A continuación presentamos 7 tendencias en el sector automotriz para el 2025 que ayudarán a comprender y capitalizar estas oportunidades de negocio tanto para las compañías automotrices, agencias de venta, distribuidores y conductores.
1. Personalización
Cada vez más consumidores buscan vehículos que reflejen su estilo y necesidades. Desde accesorios funcionales hasta modificaciones estéticas, la demanda por opciones customizadas crece a pasos agigantados. Esto abre un espectro de medios para crear ofertas más atractivas y alineadas con los gustos individuales de cada comprador.
2. Electrificación
Los vehículos eléctricos (VE) dejaron de ser una alternativa para convertirse en lo cotidiano. De acuerdo con Mercado Libre, desde su división de Motors, las ventas de este tipo de autos tuvieron un aumento en el país, ya que reportaron un crecimiento de 3% en el primer trimestre del 2024 con un total de 22,350 unidades eléctricas colocadas.
Con avances tecnológicos que prometen mayor autonomía y tiempos de carga más rápidos, la adopción de estos autos está en auge, lo que responde a las necesidades de sostenibilidad, sino también a un consumidor más informado y consciente de su impacto ambiental.
3. Seguridad de siguiente generación
4. Compra automotriz digital
5. Movilidad compartida
El concepto de movilidad compartida, que incluye servicios como el carsharing, ridesharing y los vehículos bajo demanda, ha ganado popularidad en las ciudades y continuará siendo una tendencia importante hacia 2025. Esta tendencia tiene el potencial de reducir el número de vehículos en las carreteras, disminuyendo la congestión y las emisiones.
6. Vehículos inteligentes
La conectividad es otro componente crucial en la transformación de la movilidad. Los vehículos conectados, equipados con tecnologías de Internet de las Cosas (IoT), ofrecerán a los conductores una experiencia más fluida y personalizada, además de mejorar la seguridad en las carreteras.
7. Conducción autónoma
Los vehículos autónomos, aunque todavía en fases de desarrollo y prueba, se perfilan como una de las revoluciones más disruptivas en la industria automotriz. Se espera que esta tecnología avance rápidamente gracias a la integración de inteligencia artificial (IA), sensores avanzados y conectividad 5G.