MAX usó una pieza de fake out of home (FOOH) como parte de su estrategia de marketing para promocionar la segunda temporada de “La Casa del Dragón“, hecho que desató la polémica en redes sociales tras la respuesta del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), donde acusa a la plataforma de streaming de hacer “uso indebido” de la imagen de un monumento histórico como el Castillo de Chapultepec.
INAH procederá legalmente contra MAX por FOOH de La Casa del Dragón
A través de un comunicado oficial, el instituto señaló que el contenido difundido por MAX Latinoamérica para promocionar la segunda temporada de La Casa del Dragón era falsa, ya que se trataba de un montaje hecho un software de edición de imagen o inteligencia artificial, acción de marketing conocida como fake out of home.
También señaló que procederá legalmente debido al uso inapropiado del Castillo de Chapultepec.
Tanto la Secretaría de Cultura del Gobierno de la Ciudad de México como el INAH informaron a la sociedad mexicana que en ningún momento la plataforma de streaming había colocado banderas, pendones u otro material publicitario en dicho inmueble.
Así mismo indicaron que tampoco hubo autorización de su parte para que MAX reprodujera imágenes de La Casa del Dragón en espacios del Castillo de Chapultepec, acción que para ambas instituciones fue suficiente para emprender una acción legal en contra de la empresa de entretenimiento on demand.
El castillo de Chapultepec, en México fue reclamado por su reina Rhaenyra Targaryen y el consejo negro. Es momento de elegir tu bando #RaiseYourBanners #LaCasadelDragón #HOTD2 pic.twitter.com/eZIWYminFI
— Max Latinoamérica (@StreamMaxLA) June 10, 2024
Fake Out Of Home, ¿ilegal o no?
El Fake Out Of Home (FOOH) se define como una técnica de marketing que utiliza imágenes o videos digitales para crear la ilusión de anuncios publicitarios en espacios exteriores, sin que estos anuncios realmente existan en esos lugares, siendo la viralidad uno de sus mayores atributos gracias a la espectacularidad de las piezas creadas con inteligencia artificial o imágenes generadas por computadora (CGI, por sus siglas en inglés).
Pueden incluir desde carteles en rascacielos hasta vallas publicitarias en carreteras concurridas, todo sin los costos y la logística asociados con la publicidad exterior tradicional.
Dado que se trata de imágenes falsas, generadas con dichas herramientas tecnológicas, no hay una intervención real de los espacios, edificaciones o lugares que muestra.
Y aun cuando se trate de sitios históricos, al no tener publicidad real sobre ellos, es decir, que no hubo manipulación o afectaciones al inmueble, un proceso legal en contra de la marca que emplea FOOH sería injustificado por el simple hecho de que se trata de algo irreal.
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