Hace unos meses, diversos medios publicaron una nota que sacudió el cerebro de mucha gente: Jeff Bezos, el fundador de Amazon y ahora el hombre más rico del planeta según Forbes, aseguró que en su organización estaban prohibidas las presentaciones en PowerPoint o cualquier otro programa que se le pareciera (como Pretzi o Google Slides).
Bezos argumentó que era una mejor idea emplear memorándums o memos (no mayores a seis páginas) para comunicarse, en lugar de hacerlo con los famosos bullets en una presentación. El creador de Amazon reveló que una estructura narrativa es mucho más efectiva que el formato de presentaciones que casi todos empleamos. Ya que, en lugar de leer bullets o viñetas durante una presentación, mientras todo mundo hace más caso a las diapositivas que al interlocutor, es preferible dedicar 30 minutos a un memorándum narrativamente bien estructurado con enunciados, verbos y pronombres. Después de leerlo, el equipo puede discutir un tema o una idea con una mayor comprensión y conocer el punto de vista de quien lo redactó.
Pero, ¿la iniciativa es una buena idea o simplemente un capricho que surge por la preferencia personal del director de Amazon?
La verdad es que, detrás de la decisión que cimbró la forma de trabajar de los colaboradores de la compañía y generó discusión, hay un trasfondo muy interesante, así como motivos de peso para pensar que fue una idea brillante. La propuesta de Bezos tiene 3 lecciones de Storytelling para meditar:
1. Los bullets o viñetas no son eficaces para comunicar grandes ideas
Echa un vistazo a las presentaciones que han hecho Richard Branson, Steve Jobs, Walt Disney, Martin Luther King, John F. Kennedy, Elon Musk o el propio Jeff Bezos. No leen bullets o basan sus presentaciones en gráficas aburridas, prefieren contar historias. Cómo surgieron sus ideas, por qué creen en ellas y cómo llegaron a sus resultados. Piensa también en las conferencias y presentaciones que más te han marcado, te aseguro que no recuerdas las gráficas o los enunciados resumidos en las viñetas, pero si las historias que narraron los presentadores. Por algo TED Talks tiene un formato narrativo y éste prescinde de las estructuras acartonadas que soportamos en muchas reuniones.
2. Nuestro cerebro prefiere y entiende mejor la narrativa
La razón es sencilla, la primera forma de aprendizaje del ser humano hace miles de años, surgió alrededor de una fogata mientras contaba historias de caza y compartía sus hazañas. El conocimiento se transmitió de boca a oído por miles de años más, antes de que incluso surgieran los jeroglíficos, los códices y finalmente la escritura y la comunicación audiovisual. El cerebro se entrenó todo ese extenso período a recordar la información verbal y por ello la inclusión de emociones también favorece la retención a largo plazo.
3. Las historias apelan a la emoción, mucho más eficaz que la razón
Nos gustan las historias de héroes que pasan por dificultades y salen victoriosos. También las historias que apuntan más al corazón que a la razón. Esto lo sabe muy bien Hollywood, lo ejecuta magistralmente Disney, e incluso, ya lo conocían muy bien los antiguos griegos con la Iliada y la Odisea que se atribuyen a Homero.
El neuromarketing no para de confirmarlo y las campañas publicitarias más eficaces emplean las emociones como ejes centrales. Por ello es necesario un formato que permita contar historias de la mejor manera.