Donald Trump definitivamente pasará a la historia como uno de los gobernantes más polémicos no sólo de su país, sino también del siglo XXI. Desde su postura de desacreditación hacia tratados internacionales como el Acuerdo de París o sus agresivas políticas migratorias, todo esto ha dado de qué hablar. Sin embargo, una de las acciones que posiblemente tenga más consecuencias en el orden mundial actual es la guerra comercial que ha comenzado con distintos países: México, Canadá, los miembros de la Unión Europea y principalmente en China, siendo esta última nación la primera a la que le impuso aranceles en acero y aluminio. Sin embargo, la batalla comercial ha alcanzado una nueva escala, debido a recientes medidas tomadas por EU.
De acuerdo con datos de BBC, la mañana de este viernes entró en vigor la imposición de aranceles a cientos de productos chinos, cuyo valor equivale a cerca de 34 MMDD. En este marco, China ha acusado a Estados Unidos de comenzar la mayor guerra comercial en la historia económica.
Si bien esta guerra comercial no es una guerra real, puede desatar una serie de consecuencias que podrían llevar a situaciones mucho más serias. Sin embargo, esta pugna no sólo afecta al producto interno bruto de una nación, sino que al final de cuentan termina dañando los ingresos que generan las empresas y, por supuesto, el consumo de los clientes.
Cabe destacar que los aranceles impuestos por Estados Unidos a China afectan en primera circunstancia a tecnología comercializada para hacer otros bienes, por ejemplo chips.
En respuesta, China ha interpuesto aranceles a productos agrícolas, provenientes de Estados Unidos, pero al petróleo y artículos médicos. Finalmente también ha realizado impuestos al sector automovilístico.
Aunque los analistas no saben a ciencia cierta cuáles podrían ser los escenarios más probables, resultados de la guerra comercial, lo cierto es que Estados Unidos se está poniendo en una situación de desventaja. Al final de cuentas, este tipo de situaciones pueden hacer que las personas pierdan su capacidad adquisitiva.
