Ciudad de México.- E-mail marketing, anuncios impresos y movilizaciones en las calles son los elementos de esta campaña que protesta en contra de marcas como Zara, Calvin Klein y Victoria’s Secret.
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La campaña está basada en el estudio Toxic Threads: The Big Fashion Stitch-Up que revela los químicos tóxicos que utilizan más de 20 marcas globales de moda par fabricar sus prendas. De acuerdo con el análisis, estas compañías están convirtiendo a sus clientes en cómplices de la contaminación del agua.
La organización ambientalista realizó pruebas en diferentes productos en busca de Etoxilatos de nonilfenol (NPEs por sus siglas en Inglés) responsables de contaminar grandes cantidades de agua y provocar enfermedades como el cáncer.
Green Peace compró prendas provenientes de 29 mercados regionales del mundo a través de distribuidores autorizados para garantizar la fiabilidad de las muestras. Los resultados fueron los siguientes:
Ante esta situación Green Peace emprendió una campaña de protesta ligada a un proyecto conocido como el Reto Dotex que invita a las empresas a eliminar sustancias peligrosas para el medio ambiente.
“El año pasado, gracias a la presión que ejercimos cientos de miles de ciudadanos y consumidores en todo el mundo, Nike, Adidas, Puma, H&M, Marks & Spencer, C&A y Li-Ning, se unieron al reto Detox y se comprometieron a dejar de desechar sustancias peligrosas al medio ambiente, a lo largo de toda su cadena de producción para el 2020” comenta Pierre Terras de Green Peace México.
A continuación algunas piezas de la campaña Toxic Threads: