Durante mucho tiempo Gap fue uno de los principales líderes en el sector retail de la moda, atrayendo a miles de jóvenes de países como Estados Unidos, Canadá, Chile parte de Europa, Japón, Perú y Colombia, donde tiene importante presencia, sin embargo este retailer ha visto mermadas sus ganancias en los últimos cinco años, obligándolo incluso a cerrar algunas de sus tiendas.
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A través de un comunicado, la empresa informó que va a cerrar 175 tiendas en Norteamérica en los próximos años debido al poco interés que han mostrado los millennials por sus productos, dichos cierren representarían una pérdida en ventas por alrededor de 300 millones de dólares.
Uno de los factores que ha provocado la crisis en el sector retail y que ha dañado seriamente a Gap, es el cambio en los gustos de los consumidores, pues anteriormente se definían como una misma entidad, es decir aceptaban todos el mismo modelo propuesto por el retailer, sin embargo ahora, los millennials buscan ropa que los haga únicos, prendas que no tengan saturado el nombre de la marca y que marque tendencia.
Aunado a esto, Gap se ha tenido que enfrentar otros retailers como Abercrombie & Ficht y Aeropostale, mismos que han sabido atraer con ingeniosas técnicas Below the Line a sus clientes, desde modelos con poca ropa en las tiendas, hasta promociones especiales y precios accesibles para la mayoría.
Otro factor que esta provocando la crisis, es la tecnología, a pesar de que productos como los de Apple son más caros que unos jeans, las personas prefieren comprarse un iPhone, un iPad o un Apple Wach pues los hará estar en conexión con el resto de la sociedad a comprarse un simple suéter.
Además, los retailers tecnológicos pueden ocupar espacios muy pequeños para sus productos y el personal también es reducido, lo que les ayuda a bajar sus costos de mantenimiento a diferencia de los retailers de la moda que necesitan grandes almacenes para mostrar su mercancía y por ende requiere de un mayor personal, lo que obviamente aumenta sus costos.