El sector retail en Venezuela se ha visto muy afectado en los últimos años debido al tenso ambiente político que se vive en el país, lo que ha derivado en una de las tasas de inflación más altas del mundo provocando que muchos supermercados sufran constantemente de escasez de productos, además de que alimentos básicos como harina, leche o huevo tengan que venderse en ciertas cantidades.
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De acuerdo con Euromonitor, el gobierno del presidente Nicolás Maduro ha limitado la cantidad de dólares americanos que los comerciantes pueden obtener a partir de la importación y en el 2013 hubo una carestía en la ubicación de estos deseados dólares, lo que significa que los comerciantes deben limitar sus ofertas en cualquier momento para evitar quedarse sin stock”, a este panorama sombrío se suma que las tiendas de descuento son propiedad del gobierno chavista, lo que agrava la situación económica del país pues no representan un alivio para la inflación.
Sin embargo no sólo los retailers físicos sufren, sino también los online pues el gobierno creó una ley que limita las ventas online a una cantidad de 400 dólares por persona al año.
“Aunque los venezolanos con tarjetas de crédito o débito extranjeras puedan gastar más, la gran mayoría de la población está limitada a tal monto. Por tanto, los comerciantes locales no se sienten inclinados a abrir tiendas en línea a pesar de las mejoras tecnológicas y el mayor acceso a internet”, señala Euromonitor en su estudio, “Las cinco principales tendencias en la industria del retail”.
Sin embargo está situación puede cambiar tras los resultados de las pasadas elecciones, donde la oposición venezolana logró por primera vez en 20 años, 99 curules lo que sin duda podría cambiar muchas leyes a favor de empresas tanto nacionales como extranjeras.
Filros Guzmán, quien trabaja como camarero y que siempre había votado por el chavismo decidió no hacerlo esta vez porque “no se puede votar por el gobierno cuando hay problemas para sobrevivir. El papel sanitario no se consigue”.