Ciudad de México.- Los llamados medios publicitarios BTL (Below the line) se han visto beneficiados con el nacimiento de las nuevas tecnologías, sin embargo, existen materiales tangibles que lejos de perder fuerza, parecieran tomar nuevos aires al unirse con las estrategias emergentes. Entre ellos se encuentran los llamados POP (Point of Purchase).
Más notas de punto de venta:
Te conformas, exiges o dialogas ¿Qué tipo de comprador eres?
Recaudan optimismo: Activación de Coca-Cola para el Mundial
Industria retail reporta pérdidas millonarias por robo de carritos de supermercado
De acuerdo a la definición proporcionada por la Red Gráfica Latinoamérica, el POP es una categoría del marketing que recurre a la publicidad puesta en los puntos de venta, busca generar una permanencia de la marca recurriendo a una gran variedad de objetos donde se puede imprimir o estampar información de la empresa o producto.
Son tan variados que representan diferentes oportunidades: llaveros, relojes, calendarios, encendedores, bolígrafos, mouse-pad, memorias usb, calcomanías, camisetas, alfombras, pisa papeles de escritorios, carpetas, blocks de notas, bolsas de mercado o tiendas, agendas personales o de escritorio, gorras, franelas, camisetas, tazas, vasos, etc.
Cabe destacar que la adquisición de este tipo de material depende mucho del presupuesto de la empresa y el perfil del público meta, ya que siempre debe tomarse en cuenta la utilidad que el cliente pueda darle al material que recibe, es decir, si puede utilizarlo en su vida cotidiana, la marca permanecerá con él un periodo considerable.
¿En qué momentos la empresa necesita los materiales POP?
1. Cuando se encuentra en una primera etapa de introducción y se quiere difundir, pero no se cuenta con los medios necesarios para hacer una pauta en televisión o radio por los amplios costos que trae.
2.Cuando se está bien posicionando se puede utilizar el POP para fidelizar al cliente. Esto es importante porque, el material POP, si es bien manejado puede ser recibido por parte del cliente, no como una publicidad más, sino como un regalo que agradecerá si es de utilidad.