En varias ocasiones nos preguntamos que es lo que nos está pasando con el trabajo que tenemos, y sobre todo que pasa con nuestra vida en general.
Por un lado pensamos y creemos que la vida en general no avanza, nos sentimos presionados y nuestros proyectos lentos.
Más columnas de Roberto González:
Consideraciones que debes tomar en tu estrategia Go to Market
Marketing a la carte
Lenguaje corporal que vende
5 tips para cautivar a tus shoppers
Es posible que no estemos organizados y por falta de planeación veamos que dichos proyectos se tarden más de la cuenta, este retraso genere frustración, hagamos acciones desesperadas e inesperadas y finalmente perdamos toda oportunidad de llegar al éxito.
Está comprobado que gran parte de nuestro tiempo lo perdemos en suposiciones y percepciones que no siempre son benéficas para nuestra vida y carrera.
Por lo cual aquí enlisto algunos factores que nos hacen llegar mas lentos a nuestro éxito:
- Perder el objetivo a corto y mediano plazo; es decir, estamos tan ocupados en el objetivo a largo plazo, que perdemos el enfoque de nuestra carrera y de lo que queremos.
- No tenemos un plan claro, con procesos y tiempos; mucho menos tenemos alternativas si hay alguna contingencia, eso nos hace retomar, redefinir y sobre todo perdernos por un tiempo en retomar el rumbo.
- No estableciendo prioridades; este ejercicio debe hacerse diario, perdemos mucho tiempo en cosas que se hacen y no tienen prioridad o no son importantes.
- No poner dentro del plan todas las interrupciones del mismo, o contingencias; el famoso “colchón” a nuestro plan desaparece! Estamos tan acostumbrados a correr, que perdemos hasta el tiempo para revisar lo que hacemos y cuidar los detalles.
- Falta de motivación; es común que algún resultado no salga como lo esperemos, debemos ser claros y consientes que el ejercicio “prueba y error” vendrá a nosotros muy seguido, no significa que debemos movernos, significa que podemos hacer las cosas mejor.
- No pensar en los resultados a corto plazo; define hacia donde te llevan y re direcciona si es necesario.
- No toma recesos necesarios; es importante descansar por momentos, despejar la mente y volver con el mismo entusiasmo después.
- No supervisar y delegar; es muy común que queremos hacer todo, y estoy seguro que lo puedes hacer, pero también debemos de confiar en las personas que nos ayudarán a llegar a nuestros objetivos.
- No eliminar distracciones; el correo, las redes sociales, conversaciones no relevantes entre otras cosas; cosas como estas nos hace perder el tiempo y el enfoque de donde vamos.
- Madruga; es muy cierto el dicho “el que madruga, Dios lo ayuda” sobre todo que puedes empezar antes que todos, te darás cuenta que avanzas más rápido por que se reducen el numero de llamadas, juntas, etc. Que te ocupan en el día y no te dejan avanzar.
- No empezar con lo que no te gusta o los temas difíciles; “al mal paso” de esta forma dejas las cosas motivantes para después y automáticamente aceleras lo primero para llegar a lo divertido.
- No aprende a decir NO; esto es muy importante, el no decir NO te puede orillarte a tomar acciones y eventos que no construyen con tus objetivos y te hace perder el tiempo.
- No medir lo que se puede medir; es cierto que las empresas que no miden, no saben sus avances, y los que miden en exceso, se pierden en tantos análisis, por lo cual dentro de tu plan solo mide lo necesario y lo que te hará crecer en todo momento.
Finalmente el tomar las metas a corto plazo como parte de tu plan te harán hacer el camino mas corto y mas placentero.
Lo que es un hecho es que no debes desilusionarte y seguir mirando el objetivo cueste lo que cueste. Recuerda que “Roma no se hizo en un día”, que tienes que trabajar fuerte y sobre todo ser constante en tus procesos y metas.
Las grandes empresas construyeron su Equity a través de muchos años, no te creas que por que las redes sociales hacen que la fama sea rápida y efímera, significa que tu imagen perdurará por siempre.
Con empeño y constancia es como las grandes figuras construyen una buena imagen de ellos mismos.
Y ¿tú? ¿Cómo construyes tu imagen?