Convenciones, conciertos, ferias son algunas de las herramientas que se utilizan en el event marketing. Entre toda la gama de estrategias y herramientas con las que cuenta, las exposiciones son de las actividades más importantes y frecuentes que ocupan las empresas y las marcas, incluso sectores completos. Por este motivo, es muy importante saber cómo se organizan y qué elementos hay que tomar en cuenta en su ejecución.
Para que una exposición sea un éxito, lo primero que debemos hacer es definir entorno a qué tema girará dicha actividad: libros, franquicias, mascotas, cómics, etc. Prácticamente cualquier sector puede hacer uso de esta herramienta, pero sí es fundamental saber la temática.
Lo siguiente que hay que hacer es buscar a las empresas, particulares u organizaciones que formarán parte del evento. Habrá casos en los que las mismas marcas serán quienes soliciten formar parte de este tipos de exposiciones. Empero, hay que ser particularmente cuidadosos en la selección de los participantes. Por ejemplo, para escogerlos habrá que verificar que sean del mismo sector o industria y que tengan un público meta similar (o al menos que comercialicen productos complementarios a aquellos que protagonizan la actividad).
Sin lugar a dudas, y como pasa en cualquier estrategia de event marketing, a la hora de organizar exposiciones hay que elegir el venue correcto para llevarlo a cabo. Debe ser lo suficientemente grande para garantizar que haya un espacio para cada uno de los participantes. También debe contar con los aditamentos necesarios para que la actividad se lleve a cabo con toda normalidad: desde contactos de luz, hasta un buen servicio de audio, entre otras cosas.
Por supuesto, al momento de realizar una exposición, será fundamental establecer los indicadores que buscan lograrse: por ejemplo, la cantidad de participantes y el número de visitantes que se espera que asistan, esto con la finalidad de evaluar los resultados y optimizar próximos eventos.
