Carecer de algo qué contar
Acomodo de producto, visual merchandising, imagen de marca, elementos que apelen a los sentidos del target, entre otros, no es una opción si lo que se busca es dar una experiencia y motivar la compra. Recuerda que debes comunicar, no sólo vender.
No tener suficiente stock o artículos disponibles
Esto suele ser una de las razones por las que el shopper puede salir de tu tienda, y en el peor de los casos, no volver a ella, lo que puede incluso generar una mala imagen y publicidad negativa.
Prescindir de tecnología
No se trata de comprar o rentar tecnología de última generación o tenerla en cada rincón de la tienda; se debe tener sólo la correcta y la que en verdad ofrezca un valor agregado a la marca y beneficie al cliente, aun cuando se tenga el poder adquisitivo para disponer de ella. Busca que la tecnología refuerce tu marketing en PDV.
Ver Internet como un medio, más no como una nueva forma de compra y consumo
Tener un sitio en la red, estar en social media y desarrollar contenido para un blog no se limita a ser sólo un medio para informar, sino también para generar interés, ser relevantes en el consumidor y, sutilmente, impulsar una venta.
Es por esto que la omnicanalidad se ha convertido en la opción más viable para empresas y retailers.
No tener material de comunicación suficiente ni correcto
Todo el material POP que aporte información adicional, haga destacar tu marca y productos y motive la compra, siempre es necesario, aunque la selección del mismo y su diseño deben estar alineados a los objetivos de negocio.