Este mes InformaBTL cumple 6 años, y lo festeja llevando a sus lectores la opinión de los expertos sobre las nuevas tendencias y estrategias en el medio. Te presentamos la última entrega de esta serie de colaboraciones especiales.
Por Carlos Verástegui
Director de marketing Ache Producciones
Uno de los canales más recurridos por el marketing son los eventos, éstos son usados como un punto clave ya sea de lanzamiento, culminación o transición de una campaña.
Pero ha sido en últimos años que han tomado un verdadero rol estratégico más allá del protagonismo habitual e inherente de los mismos, es decir, los eventos siempre han sido espectaculares pero no siempre habían sido estratégicos.
Es hasta hace unos años que el event marketing se ha insertado como parte de la estrategia activa de Marcas, Empresas, Organizaciones y Gobiernos por medio de diversos formatos como: fiestas, sport events, exposiciones e incluso grandes festivales musicales.
Muchos recuerdan los grandes eventos de lanzamiento de automóviles realizados en los años ochentas e incluso ya entrados los noventas; eventos en donde se gastaban cantidades estratosféricas en acciones estrafalarias que al final se quedaban en un solo día, sin mayor amplificación y meta que el gusto personal del gerente e invitados en turno.
Hoy los eventos tienen metas mucho más amplias y están plenamente conectados con el resto de las acciones que una marca realiza en la consecución del objetivo específico de su campaña.
La vinculación va desde su campaña ATL hasta su PR, todo con el fin de amplificar la experiencia que unos cuantos vivieron a un margen mucho más amplio logrando un ROI sobre inversiones que en la mayoría de los casos son millonarias y se diluyen en un solo día.
Ejemplo de lo anterior es la actual campaña de Smirnoff llamada “Nightlife Exchange Project“ ésta tiene como fin 50 eventos alrededor del mundo en un mismo día pero no es la meta en realidad, es el fin, ya que en esa serie de eventos culminan una serie de acciones que tienen como objetivo llevar lo mejor de la vida nocturna de todos los países a cada consumidor a través de Social Media, OOH, PR, ATL, BTL, Trade finalizando en la noche que conjuntará todas estas acciones en un espacio cumbre para el consumidor brindado por la marca.
Tenemos aquí un gran ejemplo de una campaña global adaptada a más de 50 mercados cuyo eje es el event marketing, implementado estratégicamente para ser un factor de comunicación unificador de todos los demás canales de marketing.
Sean entonces bienvenidos al event marketing estratégico, pilar fundamental de cualquier campaña 360 y cuya correcta ejecución refleja en un solo espacio y momento el éxito o fracaso de una Marca.