Cuántas veces hemos ido a eventos que nos han dejado un mal sabor de boca por su mala organización o bien, porque simplemente no cubrió nuestras expectativas. En el campo del BTL es muy sencillo apreciar un evento bien realizado, pero es más fácil detectar un evento mal ejecutado. De ahí la importancia de tener un plan y enfocar los esfuerzos al objetivo meta: generar una buena experiencia de marca.
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Para realizar un evento, de acuerdo con especialistas, primero hay que tener en cuenta qué tipo evento se quiere realizar: si se trata de lanzamientos, conferencias, relaciones públicas, cocteles, congresos, seminarios, etcétera. Al final todas las acciones van encaminadas a lograr que el objetivo del evento se cumpla.
Un punto interesantes es la ubicación, pues la elección de ésta radica en las facilidades de regulación o contratación y del presupuesto de la compañía. Dice Arturo González, de ASERO & GONZÁLEZ, a veces se pueden hacer grandes cosas sin tener tanto dinero, pero cuidado, porque en un evento cada detalle hace la diferencia y siempre podemos toparnos con un event killer.
De acuerdo con nuestros expertos los siguientes 8 puntos son típicos de un asesino de evento:
- Impuntualidad por parte de los organizadores
- Falta de señalización
- Falta de servicios
- Desconocer información del evento por parte del staff
- Fallas técnicas – Traducción, audio y video
- Ausencia de un speaker
- Falta de comunicación entre los organizadores
- Incapacidad y presupuesto para acceso a Internet a gran escala
Finalmente, hay cosas que no están a nuestro alcance y siempre se salen de control por cuestiones ajenas a nosotros. Sin embargo, es importante que sí se ponga atención a aquello que es perfectible durante un evento de marca.
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