La pandemia por Covid 19 derivó que poco más de un millón de negocios en México, específicamente uno de cada cinco, tuvieran que cerrar de forma definitiva. De acuerdo con el Inegi (Instituto Nacional de Estadística y Geografía), se estima que de los 4.86 millones de establecimientos micro, pequeños y medianos, sobrevivieron 3.85 millones, un millón 10 mil 857 cerraron y nacieron 619 mil negocios.
Esta situación originó una pérdida significativa de empleos, según la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE), 12 millones de personas integraron la tasa de población desempleada (entre abril y diciembre del 2020).
Y de la población económicamente activa 6 de cada 10 personas tienen un trabajo informal, es decir, quienes laboran en unidades económicas no constituidas como empresas, y que no cumplen con los requisitos básicos de proveedores de bienes y servicios, que presentan condiciones como el autoempleo , la no remuneración o carencia de seguridad social.
Ventas en establecimientos como fuentes de empleo informales
La fuerza laboral de los empleados de ventas en establecimientos durante el cuarto trimestre del 2020 superó los 5 millones de personas, de acuerdo con el registro de Data México, con un salario promedio de 3 mil 490 pesos trabajando alrededor de 41,2 horas a la semana. Y aunque el auge de la pandemia generó una disminución del ejercicio de esta actividad del 3.74 por ciento, cerro 2020 con la recuperación de más de 190 mil empleos.
Sin embargo, no es nuevo el que este tipo de funciones de desempeñen en la informalidad, being en un 100 por ciento adultos mayores de 75 años (22 mil 500) los que trabajan bajo estas condiciones, en tanto el 81,9 por ciento de los prestadores de estos servicios están en un rango de edad de 65 a 74 años (93 mil 200), no menos alarmante el 70,3 por ciento de los empleados de ventas en establecimientos son jóvenes de entre 15 y 24 años (945 mil) de los que no se sabe si alternan esta actividad con sus estudios o dejaron de ir a la escuela para apoyar a sus familias.
¿Qué sectores emplearon ventas por establecimientos?
El comercio al por menor de abarrotes y alimentos fue la principal fuente de empleo en México durante la pandemia en un 31,9 por ciento; el sector de productos textiles, excepto ropa un 13.1 por ciento; el comercio minorista de automóviles y camionetas 10,5 por ciento; muebles para el hogar y otros enseres domésticos 7,51; la venta de artículos para el cuidado de la salud 7,18 por ciento; artículos de perfumería y joyería 6,44 por ciento y artículos de ferretería, tlapalería y vidrios 5,22.
Estas fuentes de empleo destacan las tendencias de lo que demandó el consumidor durante la pandemia, y el comportamiento de la actividad económica aún con los cierres por el confinamiento y como parte de las medidas sanitarias para evitar contagios por coronavirus. Cabe recordar que en la Ciudad de México así como en otras entidades hubo cierres parciales de establecimientos que no se dedicaron a la venta de artículos de consumo básico.
Con la pandemia el consumidor también dejó de frecuentar el punto de venta y se inclinó mayormente a abastecerse a través de canales digitales, mismos que aún con cierta recuperación del semáforo epidemiológico, se han quedado en las preferencias de consumo, esta situación también impactó a establecimientos y que para sostenerse el único recurso que tienen es brindar empleos informales a poblaciones vulnerables (adultos mayores y estudiantes).
Otras notas que también te pueden interesar:
Beneficios clave de iniciar un marketplace online
Así cambió el Covid 19 los hábitos de consumo de los mexicanos
Paga con solo deslizar la palma de tu mano, Amazon muestra el futuro del retail