Ni todos los negocios son iguales, ni los clientes tampoco lo son. Esto nos lleva a pensar que las necesidades que tienen unos y otros son bastante distintas. Si bien, esto es completamente cierto, hay algunos lineamientos comunes que podemos tomar en cuenta para mejorar la experiencia tanto del shopper como del consumidor. La finalidad es ofrecer un servicio óptimo, de tal modo que esto genere un impacto positivo en la gente, quien usualmente tiende a recomendar a sus conocidos aquello que les causa un impacto positivo.
Resolver cualquier tipo de duda que tenga el cliente es una de las prioridades para mejorar su experiencia en un punto de venta, de acuerdo con datos de Entrepreneur. Esto, además de mantenernos en constante comunicación con el shopper y el consumidor, nos permitirá tener una continua retroalimentación, por medio de la cual, sin duda, podemos conocer qué es lo que está fallando y qué es lo que está funcionando.
La comunicación en general es una pieza clave en la mejora de la experiencia del cliente. Escucharlo es muy importante. De hecho, Gestionar Fácil explica que para realizar esta labor habrá que realizar una compilación y análisis de las quejas que tienen los shoppers y los consumidores. Esta acción nos permitirá establecer planes de contingencia y además de que también servirá para optimizar la experiencia del cliente.
La atención personalizada, según datos de Question Pro, es fundamental para mejorar la experiencia del cliente en un retailer, ya que esto ayudará a que se sienta más valorado, al par de que también se genere una mayor confianza. Cabe destacar que cuando se personalizan las interacciones con el público meta se pueden crear estrategias que sean mucho más efectivas.
Los tiempos de reacción también son muy importantes al momento de ofrecer la mejor experiencia del cliente. Debemos tratar de ofrecerle soluciones lo más rápido que sea posible.