La exhibición adecuada del producto es fundamental para condicionar la compra por parte del cliente. Una buena exhibición debe acompañarse de material POP, sin dañar la presentación en la góndola. Por tanto,La exhibición es la conversión de las características del producto en beneficios para el cliente.
A continuación, te mostramos algunas normas que se deben seguir para una exhibición exitosa:
La cara vendedora del producto
La cara vendedora del producto o facing debe estar estar bien expuesta, es decir, orientada hacia el campo visual. El facing es la superficie que ocupa una unidad de producto en la frontal de una estantería o expositor.
El umbra de percepción
Se trata de la longitud mínima de lineal que necesita cada producto. Se recomienda que como mínimo sean 3 facings, pero si los artículos son demasiados estrechos o demasiados anchos la longitud debe ser de 20 cm para que pueda ser percibido.
El lineal es el espacio destinado en un establecimiento comercial a exponer los productos ofrecidos a los clientes.
No deben existir roturas de stock
Cuando hablamos acerca de roturas de stock, nos referimos a la ausencia de productos en el punto de venta porque se han agotado las existencias. Algunas consecuencias pueden ser:
- Los clientes pueden cambiar de establecimientos.
- Si la rotura es frecuente puede dañar la imagen de la empresa y de la marca.
- Se desaprovecha un espacio que al comerciante le supone un coste.
No saturar el lineal
Saturar el lineal con muchos productos puede causar que el cliente piense que nadie compra los productos. Por esa razón, es mejor idea dejar adrede huecos entre uno o dos productos para evitar esa mala impresión.
Por último recuerda que los productos no deben dar la impresión de que se vayan a caer, es decir, deben tener una imagen de estabilidad. Presentarlos de forma correcta permite a las tiendas un aumento de las ventas.