Las cosas o actividades que una persona o grupo social en particular usualmente hace se conoce como estilo de vida, de acuerdo con el diccionario Cambridge; dicho de otra manera, incluye aquellas actividades que se realizan diariamente o con frecuencia, en las que influye el ambiente en el que se interactúa.
Muchos nos preguntamos ¿Qué podemos hacer para llevar un tipo de vida saludable? Existen dos aspectos fundamentales: actividad física y alimentación correcta; ambos temas recurrentes en las campañas publicitarias.
En Latinoamérica se han llevado a cabo campañas para promover el ejercicio y combatir el sedentarismo. Un caso sonado fue el de la marca Petrópolis, que realizó una activación en la playa llamada “Run ‘N Play” en la que instaló un tornamesa gigante en donde las personas debían correr para generar watts y así, la música continuaba en reproducción.
Otra muestra fue la campaña “El ascensor saludable”, en la que la gente apretaba un botón para llamar el elevador generada por Coca-Cola en 2013.
Se calcula que en México, el 57.6 por ciento de la población de 18 años en adelante es inactiva físicamente (60.2 por ciento son mujeres y 39.8 por ciento hombres), según datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI). En tanto que el 38 por ciento practicó un deporte en su vida, y las tres razones que provocaron su deserción son: falta de tiempo (54.4 por ciento), problemas de salud (17.8 por ciento) y cansancio por el trabajo (16 por ciento).
Debido a esto las campañas publicitarias que se promuevan en nuestro país están enfocadas a ciertos valores sociales y económicos ligados con la vida diaria, como la alimentación sana sustentada en el cuidado de las porciones que ingerimos.
Durante 2015, en Estados Unidos, se llevó a cabo una encuesta sobre los esfuerzos que hacen los estadounidenses para llevar una vida saludable. El 22 por ciento dijo que apenas en 2014 comenzaron a consumir porciones más pequeñas y el 40 por ciento llevaba más de un año haciéndolo, según estudios del sitio Statista. Por esta razón, en los supermercados y tiendas de autoservicio existen distintas versiones de un producto: mayonesas, cremas, mermeladas, jugos, entre otros, que cuentan con opciones reducidas en grasa, sal o calorías o también, varias opciones de envases más pequeños para aquellas personas que buscan productos acorde a su estilo de vida, como lo puede ser el trabajar largas jornadas, comer en la calle o, incluso, las personas que hacen ejercicio y quieren disminuir las calorías en su dieta. Es decir, actividades que buscan mejorar su calidad de vida.
The Coca-Cola Company, por ejemplo, cuenta con más de 500 presentaciones en su línea de productos, 200 de ellas con menos de 100 calorías, entre éstas empaques con porciones más pequeñas (minilata de 235 ml), los cuales presentó por medio de una campaña de street marketing donde la gente se acercó a mini quioscos muy llamativos para poderse llevar el producto. Reafirmando así su compromiso de impulsar un plan en contra de la obesidad, atendiendo las demandas de aquellos consumidores que desean mantener un equilibrio calórico y un control de peso; una estrategia interesante que apunta a un interés por sus consumidores que va más allá de incentivar ventas.
La perspectiva del Banco Mundial señala que si no hacemos nada para evitar el sobrepeso, en 2030 la cantidad de obesos podría ascender al 30 por ciento en América Latina, actualmente se calcula que la cifra ronda los 130 millones. Y es que, según la British Broadcasting Corporation (BBC), esta enfermedad es un problema que involucra diversos factores, por lo que recomienda acciones relativamente sencillas que casi cualquier persona puede poner en práctica, como aprender a cocinar, utilizar platos más pequeños, medir raciones o buscar apoyo; esto debido a que a menudo se culpan a los servicios de salud y a la industria alimentaria de cosas que uno mismo puede controlar.
Campañas como las anteriormente mencionadas, han cumplido con su objetivo de difundir los beneficios de la actividad física y la buena alimentación, como es la reducción de los peligros cardiovasculares, reforzamiento de la salud mental y mantenimiento del peso ideal, de acuerdo con la misma BBC, en el afán de las empresas por ser parte de la solución. Al final, cabe resaltar que es decisión propia tener buenos hábitos y querer moverse más para encontrar el bienestar.