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La pandemia que hemos vivimos a lo largo de 2020 e inicios de 2021, ha cambiando completamente nuestra forma de trabajo, los mercados y la economía, acelerando la revolución digital prevista para los próximos cinco años.
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Por ejemplo, un notable cambio que podemos observar en este sentido es el del liderazgo remoto. Esta nueva forma de liderar los equipos de trabajo desde la distancia se ha convertido en un desafío que prevalecerá durante los meses venideros, y que será clave para la gestión de equipos de trabajo exitosos que pueden mantener su unión y colaboración a pesar de la distancia.
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Crecimiento en la complejidad de la gestión de contraseñas: al no contar con herramientas de gestión eficientes, muchos usuarios se ven obligadas a recordar nuevas contraseñas que con el tiempo acaban olvidando o perdiendo, lo cual da lugar a un mayor número de incidencias y pérdida de productividad.
La pandemia que hemos vivimos a lo largo de 2020 e inicios de 2021, ha cambiando completamente nuestra forma de trabajo, los mercados y la economía, acelerando la revolución digital prevista para los próximos cinco años. Pero también ha modificado, sin duda, la manera en cómo las compañías se perciben a sí mismas, su equipo de trabajo y objetivos.
Las medidas de confinamiento y restricciones sanitarias han provocado que las tecnologías de comunicación, especialmente el internet y las redes privadas virtuales (VPN por sus siglas en inglés), se conviertan en un canal indispensable para la interacción con nuestro entorno, cambiando así también el paradigma de la gestión empresarial y los equipos de trabajo.
Por ejemplo, un notable cambio que podemos observar en este sentido es el del liderazgo remoto. Esta nueva forma de liderar los equipos de trabajo desde la distancia se ha convertido en un desafío que prevalecerá durante los meses venideros, y que será clave para la gestión de equipos de trabajo exitosos que pueden mantener su unión y colaboración a pesar de la distancia.
America Retail hace una lista de los problemas más comunes que te puedes encontrar durante el trabajo a distancia a través de una VPN, aquí te resumimos cinco:
Problemas con las redes : una red privada virtual permite una extensión segura de la red de área local sobre una red pública o no controlada como Internet. Sin embargo, en una escenario de conexiones masivas estas redes suelen saturarse y los problemas para conectarse son bastante comunes.
Las aplicaciones no funcionan como es debido: el desbordamiento de las VPN tiene un impacto directo sobre las aplicaciones, las cuales, al no contar con un procesamiento prioritario, tienen que competir con todo el tráfico de red, ocasionando distintos problemas.
Crecimiento en la complejidad de la gestión de contraseñas: al no contar con herramientas de gestión eficientes, muchos usuarios se ven obligadas a recordar nuevas contraseñas que con el tiempo acaban olvidando o perdiendo, lo cual da lugar a un mayor número de incidencias y pérdida de productividad.
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Complejidad en la gestión de usuarios y privilegios:las herramientas de supervisión de credenciales, privilegios y accesos requieren que los equipos permanezcan dentro de la misma red corporativa. En una situación de trabajo a distancia, la supervisión de los equipos que se mueven dentro de la red, entran en el terreno de la nebulosa.
Crecen las amenazas de violación a la seguridad: los empleados trabajan intercambiando y compartiendo datos desde diversos dispositivos personales no gestionados. Las amenazas de seguridad tanto para dispositivos, como para datos y la empresas en su conjunto, crece también de forma exponencial.
