Uno de los retos que frecuentemente tienen todos los vendedores están relacionados con su productividad. Es un desafío constante estar prospectando potenciales clientes, realizar visitas, analizar el mercado y sobre todo hacer el primer contacto con el cliente.
En este sentido, uno de los componentes clave de todos los vendedores está relacionado con su tiempo. Cada minuto es esencial para el logro de una meta. La planificación es un paso previo que debe hacerse para la ejecución de una venta. Entonces, el primer paso importante es la planificación del día de trabajo, porque es de esta manera en que se trazarán todas las acciones durante el horario laboral, por lo cual debes comenzar tu día escribiendo las actividades que debes realizar en el resto del día.
Es una actividad que debes realizar antes de comenzar a revisar tu correo electrónico, leer el periódico. Incluso, es una acción que puedes hacer justo antes de dormir (sino te es posible realizarlo a primera hora debido a que tienes que “volar” a la oficina), con la finalidad de que cuentes con una lista que te recuerde en todo momento las actividades más importantes del día.
Recuerda mantener esta lista cerca de ti para lograr una mayor productividad. Quizá una de las actividades clave que puedes realizar en cuanto llegues a la oficina es dar seguimiento a tus clientes, ¿no te parece una gran idea? Pero es necesario que evalúes la importancia de todas las actividades para que les des un orden y comiences a trabajar en “lo importante” durante la mañana, y así vayas eliminando tareas que hacen que el día se torne complicado y sin fin.
Un estudio realizado por profesores del Babson College y Institute for Corporate Productivity, muestra que las empresas que promueven la colaboración tienen cinco veces más probabilidades de tener un alto rendimiento. Cabe señalar que las personas son menos productivas debido al estrés. Según Canada Life, 9.7 millones de trabajadores estadounidenses encuestados declararon que su productividad se ve afectada por altos niveles de estrés y ansiedad por excesivas cargas de trabajo.
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