El streaming, específicamente los servicios de video on demand (SVoD, por sus siglas en inglés), han generado ingresos en todo el mundo que han ido de los 20.68 a los 29.74 MMDD para el periodo que comprende del 2016 al 2019, mientras que para el 2027 se espera que esta cifra aumente significativamente hasta los 43.6 MMDD, de acuerdo con datos de Nielsen. Esto ha sido una carnada lo suficientemente atractiva para todas las empresas de entretenimiento, específicamente las de contenido, que al ver el éxito de Netflix (que se mantendrá como el principal jugador en el mercado al menos hasta 2025 con 235.57 millones de suscriptores para dicha fecha, según digital TV Research).
El más reciente caso que se suma a la palestra de este tipo particular de streaming es Peacock, que pertenece a NBC Universal, y que, a diferencia de sus competidores búsca presentar tres modalidades de suscripción: una gratuita, una de paga y otra premium (que es más costosa), por así llamarla.
¿Cuál es la diferencia entre las tres? Mientras que las primeras dos modalidades incluyen conditio sine qua non publicidad, la tercera está exenta de anuncios. Otra de las principales diferencias que existe es la cantidad de contenidos disponible para cada caso. Mientras que en el primero se pueden acceder a 7,500 horas de materiales, en la segunda y tercera modalidad mencionada esta cifra asciende hasta 15,000 y que incluyen películas como Secreto en la montaña, Tiburón, E.T. El Extraterrestre y series como la Ley y el Orden o Will & Grace, por mencionar algunas.
Este servicio de streaming, que se lanzará en el mercado estadounidense en la primera mitad del 2020 (primero para suscriptores de TV de paga sin costo adicional y posteriormente a todo el territorio de dicha nación) busca posicionarse en el mercado a través de una estrategia de precios; sin embargo, es un trabajo titánico ante rivales como Prime Video (de Amazon), Netflix y Disney+, plataforma que tan solo en su primer día se hizo con 10 millones de suscriptores, según declaraciones de los propios ejecutivos de The Walt Disney Company.
¿Vale la pena lucha por ingresar al mercado del streaming que cada vez está más saturado? La respuesta radica en la cantidad de suscriptores que habrá: según datos de Statista, se prevé para 2022 en todo el mundo que la cantidad de hogares que tengan suscrito alguna plataforma de este tipo alcanzará los 450 millones, cifra que contrasta con los 250 millones que hubo en 2018. Lo que implica que el tamaño del pastel sea más grande y exista, posiblemente, una rebanada para cada una de las opciones.
En el caso particular de México, los ingresos generados por las suscripciones de sistemas SVoD pasarán, según estimados de PwC, de los 824 MDD a los 2,251 MDD, para el periodo que comprende de 2020 al 2023.
