Desde hace años inició la lucha en contra de la anorexia y la bulimia, una loable causa que término llevándonos a apostarle también a salvaguardar la integridad de las personas de huesos anchos y tallas más allá de la XL.
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En esa brecha y oportunidad el marketing encontró un aliciente para salir de la crisis de áreas como la moda, la cosmética y la salud, sin embargo, el segmento en nuestro país se siente excluido, limitado y amordazado.
Las marcas dan indicios de evolución, algunas comienzan con planes específicos para este target, unas se han transformado de manera total para atenderlo y otras de manera disimulada hacen que están con los robustos, al mismo tiempo que en sus comerciales siguen promoviendo el mismo estereotipo de belleza.
La razón que argumentan se basa en la premisa que supone que al sumarse a la causa, se promueve la obesidad como una forma correcta de vida. Cada postura es provista desde el cristal con que se mira, por ejemplo, en algunos países han comenzado a adaptar su estructura pública para dimensiones más incluyentes, pues a veces las butacas, paradores de autobuses, pasillos y hasta banquetas, son hechas para que los flaquitos vivan sin preocupación, pero los de tallas grandes, qué.
Pero esa es la parte del gobierno y de las organizaciones sociales. El punto es ¿qué pasa con las marcas? ¿Están dormidas? Al parecer no todas, algunas le aportan bajo las tres dinámicas que comente al inicio, otras se hacen pato y tratan el asunto como esas empresas de los 90’s que decían “yo no me dedico a ese giro”, para luego darse de topes y reconocer que el único giro en el que todos cabemos es el de ser humanos, ahí cualquier actividad, conlleva implícita la posibilidad de fijar una postura.
Existe una que me gusta y tal vez me encanta porque surge desde mi estado natal, mire usted que en ZACATECAS un par de guapas originarias del municipio de Monte Escobedo, crearon una fan page titulada ” Soy gordibuena y qué”, la cual goza de más de 113 mil suscriptores. Lo que inició como un juego para hacerle entender a sus familiares y amigos lo duros que son cuando emplean frases burlonas, hoy es una postura que ha traspasado las redes sociales.
El revés fue impactante, lo consiguieron pasando un negativo a oportunidad, tanto Rouse Ruiz como Leslie Ulloa se abrieron paso para que muchas marcas y medios las voltearán a ver. En este 2015 la revista “Vivan las Curvas” premió ha este dinámico par, ofreciéndoles un viaje pagado a D.F., un cambio de imagen, además de un espacio en su portada, sumado a los presentes de marcas como Forever21, TooWoman y Curvation, firmas que han optado por que estas chicas modelen sus prendas. Próximamente estarán participando como oradoras en TEDx Arroyo de la Plata, así que no le pierda la pista.
Hace menos de un par de semana vi Ramona en el cine, una historia donde se refleja de manera cómica, las diferentes facetas de las personas de extrasabrosas. Tiempo atrás otra película mexicana llamada Paraíso, una historia de una pareja de esposos gorditos. Entre broma y broma en el cine, la verdad que se asoma es una unión de voces a favor de la aceptación.
Por lo visto las tallas extras se están poniendo de moda o están tomando el lugar que les corresponde, lo importante es como dirían Lesly & Rouse “La lucha por la aceptación de lo cuerpos reales sigue y cada vez son más los que se unen a esta causa”.