Con respecto al sampling, sabemos que se trata de una práctica de marketing en la que se distribuyen muestras gratuitas de productos o se dan lapsos de prueba de un servicio. Esto con la intención de captar nuevos clientes.
Por lo regular se ponen en marcha campañas de sampling para lanzamientos y así promover que los consumidores se familiaricen con los nuevos productos. De este modo se genera un buen índice de respuesta, lo cual eleva la expectación.
El sampling online
Dicha práctica se utiliza de manera regular por las marcas de tecnología y ocio. Ellas tienen que habilitar sitios web que permiten el acceso a avances o demos descargables de futuros lanzamientos. Se trata de algo similar a lo que pasa con los tráilers de películas y series.
Con el sampling online se obtienen más beneficios que con el sampling común. El internet permite hacer un monitoreo de las interacciones, además se puede dar un seguimiento de las reacciones de mercado. Así se pueden hacer mejorías y planear novedades.
La mayoría de los servicios o productos online ofrecen un periodo de prueba antes de la compra definitiva. Pero todas las marcas se pueden beneficiar de esta opción de sampling. Se podría combinar offline y online.
Muchas marcas han desarrollado cupones de descuento o muestras de sampling desde su página web. Pero también hay páginas que se especializan en ofrecer a los usuarios muestras de diversas marcas. Con esta función se puede dar seguimiento al interés de un consumidor.
Con esta estrategia se puede saber si al cliente le interesó el producto, si él preferiría ciertas mejoras, se sabe si realizó la compra, si lo compartió con otras personas y otras ventajas de las compras online.
De este modo, el sampling no se queda en la repartición de muestras, sino que se sigue más de cerca el movimiento de los consumidores.
