Trabajar con marketing digital es un esfuerzo interminable para comprender mejor a una audiencia y acercarse a ella. En esta búsqueda, los especialistas en marketing siempre encuentran nuevas tecnologías y conocimientos sobre cómo usarlas para poder mantenerse al día con las expectativas en constante cambio.
La inteligencia artificial (IA) en marketing es uno de los ejemplos más destacados de eso en este momento. Con estrategias centradas en los datos, las marcas pueden utilizar el poder del aprendizaje automático para atraer más clientes potenciales y encontrar los argumentos adecuados para convertirlos. Y es que para 2025, el mercado de la inteligencia artificial superará los 100 mil millones de dólares, de acuerdo a estimaciones de Constellation Research.
Cómo la IA pasó de la ciencia ficción al marketing
La inteligencia artificial es un concepto que ha estado en nuestra imaginación incluso antes de que las computadoras pudieran hacer algo más que algunas matemáticas, y se necesitó todo un espacio para hacerlo. A medida que la tecnología avanzaba y el poder de procesamiento se abarataba, la ficción finalmente comenzó a convertirse en una realidad en las últimas décadas. Pero es muy diferente de lo que esperábamos.
En lugar de robots humanoides que realizan tareas domésticas, tenemos asistentes personales brillantes, administradores convenientes activados por voz y analizadores de datos. Y esos no fueron por casualidad. Estamos moldeando la IA para convertirnos en algo diferente, en algo más que puede ayudarnos a expandir nuestras capacidades cognitivas. ¿Qué tiene que ver con el marketing? La respuesta es solo una palabra: datos.
Junto con la potencia de procesamiento, la computación en la nube y otras tecnologías de almacenamiento que permitieron a las empresas recopilar y estructurar grandes cantidades de información, el combustible que la IA necesita para fortalecerse.
Big Data es un término relacionado con un gran volumen de información que ningún ser humano puede absorber y analizar por completo. Piensa en todos los números, indicadores y perfiles que una campaña de marketing obtiene a partir del compromiso de sus prospectos. Imagina el valor de ver las imágenes más grandes y, al mismo tiempo, comprender individualmente a cada persona de la audiencia. Este es el tipo de poder que solo la IA puede otorgar a una agencia, estudio o empresa.
Aprendizaje automático
Una tecnología capaz de equilibrar la personalización y la automatización que se puede utilizar en varias partes de un plan de marketing digital: esto es lo que implica la Inteligencia Artificial. Y otra gran parte está en un concepto llamado Machine Learning: la capacidad que tiene el software de usar datos para aprender basándose en patrones de refuerzo.
La IA llegó a un punto en el que el código en sí mismo puede utilizar la información que analiza para mejorar su propio rendimiento, sugiriendo formas nuevas e innovadoras de lidiar con los conocimientos resultantes. Una Inteligencia que tiene un conocimiento exponencial de grandes grupos de personas y de cada uno de ellos como individuos. Uno que se puede utilizar para elaborar planes, así como para llegar directamente a cada cliente potencial.
La creatividad humana y el sentimiento por las campañas convincentes no serán reemplazados, pero la IA les da a esos profesionales un nuevo ojo, uno que puede ver mucho más de lo que nuestras mentes pueden comprender y digerir en ideas prácticas e innovadoras.
Por qué utilizar la inteligencia artificial en marketing
Tratar con datos
Esta es la ventaja más obvia que una IA puede brindar a una empresa en todas las áreas, no solo en marketing. Forma parte de lo que se conoce como Business Intelligence (BI). Cuando miramos las formas tradicionales de recopilar y analizar datos, el alcance es siempre un poco superficial en comparación con lo que es posible hoy. Edad, ingresos, algunas preferencias culturales, hábitos básicos. ¿Y si pudiéramos profundizar mucho más en ese conocimiento?
Las IA modernas están aprendiendo a hacer referencias cruzadas y segmentar los datos de una manera que brinda información que nunca antes se creyó posible. Tiene KPI más consistentes y ricos que ayudan a tomar decisiones proactivas y a crear personas de comprador aún más relevantes. De esa manera, la audiencia se vuelve más predecible.
La IA es una herramienta de gestión empresarial en la actualidad. Funciona para decisiones financieras y decisiones relacionadas con la producción, especialmente al decidir sobre variables más volátiles, como las expectativas de los consumidores.
Combinando automatización y humanización
El equilibrio entre llegar a una audiencia más amplia y seguir siendo lo suficientemente personalizado, para que cada uno de ellos se sienta especial, es complicado para los especialistas en marketing. Es una tarea ardua. Con cada nuevo contenido que crees, debes pensar en el lenguaje apropiado, el CTA más atractivo, lo que hará el cliente potencial después de hacer clic en él, cómo aumentar la visibilidad del mismo, todas esas decisiones importantes que deben ser predecibles y proyectadas.
Una gran parte de lo que significa ser un vendedor digital en este momento no es producir el contenido en sí, sino a planificar su automatización para encontrar la perspectiva en el momento perfecto y en la forma adecuada. La IA puede ser la solución a eso. Con el aprendizaje automático, se pueden analizar patrones complejos para encontrar nuevas formas de personalizar la entrega de contenido, manteniéndolo eficiente y, al mismo tiempo, humano.
Comunicarse fácilmente
Los chatbots son los mejores ejemplos de cómo se utiliza la inteligencia artificial en las comunicaciones, ya que es fácil de ver en acción y comprender. La tecnología permite que el software interprete las interacciones con los humanos, prediga sus expectativas y responda en consecuencia. Se utiliza hoy en día para solicitudes básicas y conversaciones más directas, pero el futuro de la comunicación impulsada por IA pronto será un lugar común para Marketing.
Esto abrirá las puertas para influencers virtuales y marcas personalizadas que tengan la autonomía para hablar con sus clientes y crear vínculos significativos, todo eso basado en las decisiones tomadas por los CMO que no necesitarán mapear manualmente estas conversaciones.
Encontrar tendencias
Si la inteligencia artificial está aquí para ayudar a los especialistas en marketing a comunicarse con su audiencia, también es la herramienta perfecta para utilizar los datos recopilados por estas interacciones. Como dijimos, Big Data le da a una empresa el tipo de visión que era imposible hace décadas. No solo sobre lo que está sucediendo con sus indicadores en este momento, sino también sobre lo que dicen sobre el futuro.
Como la IA puede percibir patrones demasiado complejos para nuestro cerebro, sus conocimientos pueden mostrarle un futuro antes de que suceda. Un nicho, un nuevo canal de medios popular, una nueva forma de comunicación, un hábito consumidor de la próxima generación. Es prácticamente una superpotencia.
Con este conocimiento, puedes comenzar a planificar un enfoque para ejecutar tan pronto como sea posible. La innovación siempre viene con un salto, pero ahora tiene datos y fe en los que contar.
Sorprender a la audiencia
Si puedes proyectar y anticipar tendencias, puedes ser un pionero y dar a la audiencia lo que quiere antes de que se dé cuenta. Hábitos, costumbres, deseos , todos comienzan tímidos y se manifiestan en pequeñas demostraciones. Luego se incendian. Hacer marketing basado en la visualización de datos se siente exactamente así. Es emocionante y obviamente gratificante.
¿Por qué funciona una campaña? ¿Por qué no es así? Por lo general, estas evaluaciones son parte de la rutina de un comercializador. Su trabajo consiste en aprender constantemente de lo sucedido y aplicarlo en el próximo plan.En ese sentido, la IA puede brindarte información más sustanciosa sobre esos indicadores y ofrecer una mejor imagen de tu éxito.
Cosas como qué CTA funcionó mejor y por qué, o cómo un mensaje en particular impactó el comportamiento de los clientes potenciales. Luego, puedes usar ese conocimiento que era invisible en el pasado para modificar detalles específicos en tu próxima campaña.
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