Vender peladores en las calles de Nueva York parece algo tan trivial, pues se trata de un producto que incluso se puede encontrar en cualquier tienda o supermercado, pero Joe Ades fue el hombre que convirtió el acto de vender peladores en toda una experiencia de Street marketing basada en el arte.
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Era un feriante que nació en Manchester, Inglaterra y que aprendió a vender en mercados al aire libre antes de mudarse a Australia y finalmente a Manhattan.
Joe Ades empezó vendiendo historietas, ropa , joyas y juguetes en las calles, y ya como vendedor de peladores de papas y zanahorias obtuvo el título de Gentleman Peeler. “Nunca subestimes a una pequeña cantidad de dinero recogido a mano por 60 años”, decía.
Hoy día, el Street marketing es una estrategia Below the line que bien aplicada puede dar buenos resultados a las marcas, ya que sus técnicas de comercialización no convencionales son propias de los lugares públicos, por lo que se dirigen a los ciudadanos de una manera directa.