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De acuerdo a Marketing de Lamudi, la búsqueda en internet, en promedio anual, de viviendas aumentó hasta en un 93 por ciento, y un 75 por ciento en rentas.
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De acuerdo a la Confederación de Cámaras Industriales de los Estados Unidos Mexicanos, CONCAMIN, tan solo de marzo a junio, del 2020, se calcula que se han perdido alrededor de 1.8 millones de empleos y se espera que para finales de 2020, ese numero sea mayor a los 68.5 millones.
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Es decir las estimaciones sitúan a un país con pobreza de ingresos, situación que también tendrá un impacto en este sector inmobiliario.
El sector inmobiliario tenía pronosticado un año difícil, desde las primeras expectativas del 2019. En la industria se había cancelado un importante numero de proyectos y planes de inversión de vivienda. Principalmente en mercados como el de Guadalajara, Monterrey y Ciudad de México. Hay que anotar que estas tres entidades constituyen los principales músculos de desarrollo.
Se estimaba que para 2020 el desarrollo de vivienda fuera bajo. Es decir muchas personas que pretendían comprar este año, tuvieron que posponer, y esta situación continuará siendo una incertidumbre. Estos problemas podrían agudizarse por la llegada de la pandemia.
En sector inmobiliario poscoronavirus
El principal problema que ha traído el coronavirus a nuestras vidas, es esa sensación de inestabilidad, una incertidumbre que también ha impactado a los negocios. El mercado de vivienda es la muestra, debido a que muchas familias han decidido postergar compras de inmuebles, los ingresos de este sector ha tenido una baja en ingresos.
Esto encuentra cabida en lo dicho por Arturo Rosales Orozco, director de Finanzas de Homie, en El Financiero: “En una etapa post COVID muchas personas no se van animar a comprar una casa porque esto implica un compromiso de entre 15 y 20 años de tener un flujo para pagar”.
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De acuerdo a las estimaciones de este especialista se espera una caída en la contratación de créditos hipotecarios, esto como consecuencia podría significar un apoyo para impulsar más al mercado de las rentas.
De acuerdo a la Confederación de Cámaras Industriales de los Estados Unidos Mexicanos, CONCAMIN, tan solo de marzo a junio, del 2020, se calcula que se han perdido alrededor de 1.8 millones de empleos y se espera que para finales de 2020, ese numero sea mayor a los 68.5 millones.
Es decir las estimaciones sitúan a un país con pobreza de ingresos, situación que también tendrá un impacto en este sector, que ya de por sí se encontraba en condiciones desfavorables.
Un sector que busca de adaptación
Este sector es uno de los mas castigados por el coronavirus, que ha tenido que empezar a buscar nuevas alternativas frente al fenómeno global. Una de esas herramientas es sin duda el canal web. El perfil del consumidor ha cambiado y el de las empresas debe estar en sintonía con esos cambios.
De acuerdo a sitios como bitlonia.com ha diagnosticado que los consumidores cada vez buscan más en internet a cerca de compra o rente en el sector. Por ejemplo en México, el uso de las tecnología ya son parte esencial para el impulso de este mercado.
De acuerdo a Marketing de Lamudi, la búsqueda en internet, en promedio anual, de viviendas aumentó hasta en un 93 por ciento, y un 75 por ciento en rentas.
