Dado que el comercio de hoy considera a los consumidores y sus sensaciones al interactuar con las marcas, el branding emocional ha evolucionado, todo a partir de la idea de que el branding corporativo genera emociones positivas.
Pero, ¿cómo generar un correcto branding corporativo?
Aunque la estrategia es tan amplia que se puede abordar desde distintos enfoques, al menos destacan las siguientes características del branding corporativo.
Branding corporativo
Ser diferente más allá de cubrir una necesidad
Primeramente, dicha estrategia se preocupa por ofrecer una gran experiencia al entrar en contacto con el producto. La idea principal es emocionar al cliente para permanecer en su memoria y lograr que la marca sea asociada de manera positiva.
La credulidad como el motor de nuevas relaciones
Asociar el sentimiento de la confianza con una marca, producto o campaña es esencial para el acercamiento con los consumidores.
No ser la opción, sino la única manera de comprar
La calidad ya es una característica que se asume de los productos, pero ello hace que la competencia sea más compleja y eso beneficia a los consumidores. Así, aportar valor agregado con un excelente servicio al cliente o un packaging son la clave.
La marca ya no sólo destaca, ahora es aspiracional
Estar en boca de todos no es una estrategia limitada, que hablen, aunque sea mal, de una marca no es opción. La tendencia es que dicha marca sea el deseo de todo consumidor, que ésta ayude a cumplir los sueños del consumidor.
Una marca que tiene identidad requiere también de personalidad
El objetivo central es que la identidad de una marca se complemente con la personalidad que la haga especial, una distintiva e incluso carismática, con ello se produce una reacción emocional inmediata del cliente.
Así, cada empresa que consiga ser estable y premium, podrá ofrecer más que productos a sus clientes,