El edadismo institucional es aquel que discrimina a los profesionales mayores de 50 años dentro de las instituciones o fuera al ser descartados para entrevistas de empleo. Se habla de este tipo de edadismo ante leyes, normativas o servicios que discriminan y limitan las oportunidades o la participación de las personas según su edad.
En un contexto donde la experiencia y el compromiso deberían ser activos valiosos, la realidad para los trabajadores mayores de 50 años en México es alarmante. Según un nuevo estudio de Robert Walters México, el 73% de los profesionales de más de 50 años considera que han sido ignorados para ascensos en su empresa actual debido a su edad. A esta cifra se suman otros datos reveladores sobre la discriminación etaria en el ámbito laboral mexicano, que se ha convertido en un obstáculo tanto para el desarrollo profesional como para la estabilidad financiera de estos trabajadores.
Edadismo institucional: barreras para el crecimiento profesional
La discriminación por edad no solo limita las oportunidades de promoción, sino que también restringe el acceso de los profesionales mayores de 50 años a oportunidades de capacitación. El estudio de Robert Walters México muestra que el 59% de estos trabajadores sienten que su edad les impide ser considerados para cursos de actualización o nuevos aprendizajes. Esta barrera va en detrimento de sus habilidades en un mercado que exige capacitación constante para mantenerse relevante y competitivo.
Alejandro Paz, Country Manager de Robert Walters México, comenta:
“Nuestros hallazgos demuestran que la discriminación por edad es un problema real y significativo. Los profesionales mayores de 50 años son ignorados tanto en las oportunidades de crecimiento dentro de sus empresas actuales como en la búsqueda de nuevos empleos, donde muchas veces se les considera ‘sobrecualificados’ o con expectativas salariales altas. Esta mentalidad limita a las empresas de aprovechar el conocimiento y la estabilidad que estos empleados pueden ofrecer.”
Oportunidades de empleo frenadas por estereotipos
En la búsqueda de nuevas posiciones, las dificultades no son menores. Muchos profesionales mayores de 50 años sienten que han perdido oportunidades de empleo debido a percepciones equivocadas sobre su perfil. Según el estudio, el 43% reporta que las empresas los consideran “sobrecualificados” para ciertos puestos, mientras que el 25% cree que se les descarta por expectativas salariales altas, y el 17% siente que no se les considera como una opción de contratación a largo plazo.
Alejandro Paz explica: “Un profesional mayor puede parecer ‘sobrecualificado’, pero es, en realidad, una oportunidad de contratar a alguien con seguridad laboral. Además, muchos de estos profesionales han pasado años en el mercado laboral, perfeccionando sus habilidades y tienen un conocimiento claro de lo que les apasiona y en lo que son buenos. A diferencia de generaciones más jóvenes que suelen cambiar de trabajo con frecuencia, los mayores de 50 años tienden a ser más leales y comprometidos con un rol a largo plazo.”
La capacitación: una necesidad ignorada
El estudio también revela que la capacitación continúa siendo una necesidad ignorada para los mayores de 50 años. A pesar de que el 66% de los profesionales en general considera crucial actualizarse y desarrollar nuevas habilidades para adaptarse al mercado laboral, los mayores de 50 sienten que se les excluye de estas oportunidades. En un contexto laboral donde el aprendizaje constante es clave, esta exclusión puede limitar aún más sus posibilidades de avance.
Paz enfatiza: “La formación continua es vital para cualquier profesional, independientemente de su edad. Equipos de trabajo multigeneracionales ofrecen una excelente oportunidad para fomentar este aprendizaje, donde los profesionales mayores pueden compartir habilidades de liderazgo, mientras que sus colegas más jóvenes pueden enseñarles sobre tecnología emergente. Limitar el acceso a la capacitación en función de la edad coloca a estos profesionales en una desventaja importante, especialmente en lo que respecta a promociones y crecimiento profesional.”
¿Se ha convertido la edad en un tabú?
Para muchos profesionales, la edad se ha convertido en un factor incómodo, hasta el punto de que el 65% de los encuestados de todas las edades en México prefieren omitir su edad en sus CVs, y el 41% ya no incluye la fecha de su graduación para evitar ser juzgados por su edad.
“Detalles como la fecha de graduación en un CV pueden hacer que los empleadores tengan percepciones incorrectas sobre la experiencia o aptitud del candidato,” comenta Paz. “Sin embargo, algunas empresas avanzadas están optando por no solicitar edades ni fechas de graduación en los CVs, evaluando a los candidatos únicamente por sus habilidades.”
Un retiro postergado: insuficientes ahorros y falta de apoyo empresarial
Además de enfrentar obstáculos en el desarrollo profesional, los trabajadores mayores de 50 años en México también enfrentan una situación preocupante en cuanto a sus ahorros para el retiro. El 68% de los profesionales mayores de 50 años en México prevé que deberán trabajar más allá de la edad de jubilación debido a la falta de ahorros suficientes. Sin embargo, el apoyo que reciben por parte de los empleadores es limitado; en muchos casos, las aportaciones de pensión que reciben se encuentran entre el 3% y el 6%, cuando lo ideal sería entre el 7% y el 10%.
Paz concluye: “La discriminación por edad es un problema serio en el ámbito laboral mexicano. Las empresas que perciben a los mayores de 50 años como una ‘carga’ están perdiendo la oportunidad de contar con un talento experimentado, que además aporta estabilidad y lealtad a largo plazo. Después de años de experiencia, estos profesionales poseen redes de contacto amplias y valiosas que podrían aprovechar en su favor. A menudo, una simple referencia o recomendación abre puertas a nuevas oportunidades.”