El crecimiento del e-commerce en México, si bien no es como en Estados Unidos o naciones europeas, sí ha tenido un avance importante no solo en términos de cantidad de shoppers, sino también en la frecuencia de compra.
En el Estudio sobre Venta Online en México 2019, elaborado por la Asociación Mexicana de Venta Online (AMVO) y la empresa Netquest, se reveló que un 38 por ciento de los compradores digitales en el país suelen adquirir algún bien o servicio cada semana, en contraste con el 7 por ciento que solo compra algo en línea una vez al año.
Pero esta frecuencia no es el único factor que muestra un alza en las compras online en la República Mexicana, también lo referente a ingresos por comercio electrónico.
Datos de Worldpay señalan que el año pasado, los ingresos derivados de las ventas registradas en el canal online ascendieron a cerca de 18,000 millones de dólares, y según estimaciones de esta compañía el monto podría incrementar hasta alcanzar los 22,000 millones de dólares para el 2022.
E-commerce, por una confianza por parte del cliente
Malas experiencias de compra, falta de diversificación de métodos de pago, carencia de una política clara de devolución, entre otros factores han influido para que los shoppers desistan de comprar en línea, y además se pierda credibilidad como retailer.
Para evitar que una mala experiencia o la propia tienda digital alejen a los clientes, es necesario implementar ciertas acciones, como las sugeridas a continuación.
- Ser omnipresente: según Ventiapp, además de la propia tienda en línea, es necesario unirse a diferentes marketplaces que dominan el e-commerce en México como Mercado Libre, Amazon,
Linio, entre otros y con ello ganar mayor credibilidad al tenerlos de partners. - Diversificar y garantizar la seguridad de formas de pago: un estudio de Kantar Millward Brown determinó que la segunda razón para no comprar en línea es la desconfianza para dar datos de la tarjeta, con el 35 por ciento. Ante esto, el sitio web como los marketplaces y plataformas e-commerce que se seleccionen como canales de venta, deben tener sistemas de pago confiables y seguros, como algunas tiendas de conveniencia (OXXO, 7-Eleven, por ejemplo).
- Mantener stock: es necesario llevar un control minucioso de cada categoría, a fin de garantizar la disponibilidad de productos y así no estropear la experiencia de compra.
- Crear campañas de marketing digital: al tratarse de una tienda online, es importante realizar campañas de marketing en redes sociales y otras plataformas en línea que redireccionen al usuario hacia la tienda digital y se llegue al target deseado.
- No descuidar la apariencia de la página web: según la AMVO, 8 de cada 10 aseguran que la imagen de una tienda online sí influye en el proceso de compra, por lo que es vital mantenerla en buen estado, es decir, que permita la efectiva navegabilidad.
- Vincula tus redes sociales a la tienda online: dado que estos consumidores están inmersos en las redes sociales, es importante vincularlas con la tienda online y así generar mayor tráfico y elevar la probabilidad de compra.
- Ofrecer información clara y confiable sobre los productos o servicios, puestos a la venta, de manera que el usuario evite consultar otros sitios para conocer más al respecto.