Doritos Mix conquista incluso a los que están en el más allá, a esas almas que este Día de Muertos nos visitarán y que lo único que esperan es disfrutar de la comida que les encantaba en vida. Y es precisamente esto lo que podemos ver en la nueva campaña de la marca, la cual conquista incluso los paladares de los difuntos, con una dosis de humor.
Doritos Mix no puede faltar en la ofrenda de Día de Muertos
Para que este 1 y 2 de noviembre las botanas no falten en la ofrenda de Día de Muertos, Doritos Mix lanzó una campaña en la que el humor también forma parte del altar.
Como sabemos, los platillos que colocamos en la ofrenda deben ser los favoritos de nuestros seres queridos que han fallecido. Pero qué pasaría si a un buen plato con chilaquiles le pones cebolla, sabiendo que tu difunto no la podía ni ver. En una de esas sale su alma de la foto a jalarte las patas, como es la creencia popular. Pues de esto va la campaña de la marca de Sabritas.
En el spot, que ya corre en redes sociales, podemos ver varias almas que salen o se mueven en sus fotos a manera de desaprobación por ver que sus familiares les han puesto comida que no les gustaba.
Al final, independientemente de los gustos de cada persona fallecida, los Doritos Mix son esa botana que todo mundo quiere y que a todos les gusta, incluso a los más pickys del más allá.
La creación de este contenido es una forma diferente, divertida, pero al mismo tiempo respetuosa, de homenajear a aquellas personas que han partido del mundo terranal y que este Día de Muertos regresan para disfrutar de la comida que les encantaba.
Clara Contreras, Directora de Marketing de Mixes, Sabritas y Ruffles, dijo que el insight de esta campaña acerca las marcas de Pepsico a la audiencia, desde una temática distinta, permitiendo estar en el top of mind con mensajes cotidianos que respiran humor y picardía de una manera orgánica.
La Costeña es otra marca que ya tiene activa su campaña de Día de Muertos, la cual se ha vuelto tradición y que este año llega por primera vez a Estados Unidos.
El tema central de este año es el legado que los seres queridos dejan a través de su comida y enseñanzas, demostrando que el sabor nunca muere.