Las preferencias del consumidor modifican constantemente el futuro del sector minorista, sobre todo, en el mercado estadounidense. Los canales de venta disminuyen, se transforman o cobran un mayor relevancia.
Incluso, algunas categorías de productos están experimentando un crecimiento en determinados canales minoristas. Las marcas blancas es una de las categorías que goza un buen momento en la actualidad. De acuerdo con el informe “Power of private brands” de Food Marketing Institute (FMI), las ventas de marca blanca aumentaron un 4.1 por ciento, es decir, 138 mil millones de dólares el año pasado en varios establecimientos minoristas estadounidenses.
Sin embargo, la venta de alimentos de marca blanca han disminuido en supermarcados, y se ha disparado en el canal de abarrotes. En 2017, las marcas blancas representaron el 16.4 por ciento de las ventas en dólares en el canal de abarrotes, según FMI.
De tal manera que, los supermercados enfrentan un desafío competitivo, y experimentan la caida de productos de marca blanca de su canal. Sin embargo, ¿hacia dónde se dirigen los viajes de los consumidores estadounidenses?
Según FIM e IRI, lo más probable es que las compras de los consumidores se dirigen hacia otros canales minoristas, aquellos que contribuyan a la economía del consumidor. Actualmente, el 30 por ciento de las ventas provienen de categorías premium, orgánico o más barato de productos alimenticios.
Además, la investigación de FMI e IRI señalan que, 97 por ciento de los hogares estadounidenses compras marcas; 51 por ciento son compradores medianos de marcas blancas; 40 por ciento son compradores ligeros y un 9 por ciento son compradores importantes de esta categoría.
En suma, el informe señala que a pesar de que las marcas blancas han aumentado su posicionamiento en determinados canales de venta, esta categoría necesita de mejores practicas comerciales para posicionar las marcas en tienda. Cabe señalar que 19 por ciento de los compradores de marcas blancas en Estados Unidos son millennials, mientras que 31 por ciento son consumidores de la generación X.