Uno de los errores que usualmente comete un vendedor es preocupare por todos los pasos que debe llevar a cabo para lograr una venta. Esto se debe a que actualmente las organizaciones están “empoderando” a sus colaboradores para realizar una gran variedad de funciones en poco tiempo. En el caso de los vendedores deben detectar oportunidades de venta, realizar el proceso, analizar los territorios, las cuentas, etc. Pero esto ha llevado a que olviden aspectos muy importantes para la obtención de ventas y la clave sigue encontrándose en los básicos.
El buen vendedor nunca debe olvidar los procedimientos básicos que —de alguna manera— pueden asegurar la consecución de una venta. Por supuesto, existen diferentes métodos, pero cabe señalar que uno de los más notables es el AIDA: Atención, Interés, Deseo y Acción.
A través de estas fases es posible relacionarnos íntimamente con los prospectos y convertirlos a clientes. Durante años este método ha dado excelentes resultados a una gran cantidad de vendedores en todo el mundo. Sin embargo, algo que no debes olvidar hacer durante una presentación de venta es demostrar el producto. En otras palabras, debes promocionar el producto probando su funcionamiento ante el prospecto. De esta manera podrás comprobar la eficacia, así como mostrar de manera práctica los beneficios y características que tiene el producto.
Por tanto, para realizar una buena demostración de tu producto, toma nota de las siguientes recomendaciones:
Prepara un speech
Tu discurso de ventas debe incluir un espacio para poder mostrar el uso del producto que ofreces. Esto le dará más valor a tu presentación, el prospecto no solo conocerá la promoción del día; podrá conocer él mismo los beneficios la forma en que tu producto puede ayudarlo.
Enfócate en los beneficios del producto
Recuerda que el prospecto siempre tendrá esta pregunta en mente: ¿Qué tiene esto para mi? Por tal motivo, responde a esa pregunta a través de los beneficios del producto. Los mejores productos no son diseñados en base a características, sino en base a beneficios, es decir, los elementos que ayudan cubrir una necesidad o deseo específico.
Haz parte de la demostración al prospecto
Aunado a los puntos anteriores, es importante hacer al prospecto parte de tu presentación de venta. Haz que participe, crea una dinámica donde pueda ayudarte a conocer el funcionamiento de tu producto. De esta manera no olvidará lo que el producto puede hacer por él.