Sin lugar a dudas, el producto es parte fundamental de la mercadotecnia. Prácticamente sin éste, no existiría la rama, ya que no habría que vender. El mercado nos ofrece una gran variedad de artículos. Pero, ¿Cómo es que estos se clasifican? ¿Cuál es la diferencia entre uno y otro? Aunque apreciemos que un jugo de naranja es totalmente diferente a una llanta para carro, las distinciones son mucho más complejas de lo que se puede apreciar a simple vista. Para aclarar este punto, te ofreceremos una clasificación de los tipos de productos que existen.
¿Qué es una clasificación de productos?
Posiblemente esta sea la primera pregunta que nos venga a la mente. En su libro Fundamentos de Marketing, William j. Stanton, Michael J. Etzel y Bruce J. Walker, es la clasificación de productos que se hace por categorías homogéneas. Estos estudiosos mencionan que principalmente existen dos ramas: los productos de consumo y los que están destinados para empresas.
De acuerdo con el texto, la diferencia entre unos y otros productos estriba principalmente en el destinatario (¿quién los usa?) y la utilización de los mismos (¿cómo los usa?).
¿Cómo se clasifican los productos?
Como mencionábamos, en Fundamentos de Marketing se explica que los productos puede ser de consumo o para empresas.
Los productos de consumo pueden subdividirse en tres categorías: los bienes de conveniencia, los de comparación y los de especialidad. Los primeros se refieren aquellos que requieren un mínimo esfuerzo para ser conseguidos y que el shopper conoce muy bien. También, de acuerdo con Pymerang, pueden entenderse como aquellos que satisfacen una necesidad primaria. Los de comparación son aquellos que se contrastan con otros similares (respecto al precio, la calidad, etc.). Finalmente están lo de especialidad son los que tienen una cualidad específica que hará que sean buscados asiduamente por el comprador.
Los productos industriales, o para empresas, también tendrán sus categorías, cuyos nombres son muy transparentes respecto a la finalidad que tienen. A saber, están las materias primas, los materiales y piezas de fabricación, las instalaciones, equipo accesorio y los suministros de operación.
Al margen de ambas categorías están los bienes o productos no buscados, de acuerdo con Fundamentos de Marketing, los cuales son bien conocidos por el comprador, pero que de momento no son deseados o que son nuevos en el mercado.
De acuerdo con Pymerang, esta clasificación que acabamos de mencionar se basa según la finalidad que tienen los productos per se. Sin embargo, habrá otras tipologías centradas en distintas características.
A saber, y de acuerdo con el sitio antes mencionado, habría una clasificación respecto a la durabilidad (duradero y no duradero), según su cuota de mercado (estrella, vacas lecheras, productos dilema y perros), y finalmente de acuerdo a sus características (genéricos, diferenciado, costumizado y prototipo). Acerca de estas taxonomías te platicaremos más en otros artículos.
De acuerdo con Revista IAlimentos, 9 de cada 10 productos que se lanzan fracasan al tratar de mantenerse en el mercado. Una de las posibles causas es precisamente el desconocimiento de las categorías o clasificación de los artículos, ya que esto repercute en la creación de estrategias eficientes en el mercado.