El modo en el que las personas y las marcas venden y compran productos ha cambiado considerablemente ante la aparición del internet, las redes sociales y la digitalización. Esto ha dado origen a lo que se conoce como comercio electrónico (o e-commerce, en inglés), sector que se espera que crezca de manera sostenida durante los próximos años. Tan sólo para 2019 se espera que alcance los 3,453 MDD de ventas en todo el mundo. Este número podría aumentar hasta los 4,135 MDD para el año 2020. Sin embargo, además de tener un rápido crecimiento, este concepto ha evolucionado, por lo que han surgido variantes como el m-commerce, el a-commerce y el i-commerce. ¿Cuál es la diferencia?
E-commerce
Este término hace referencia al proceso de compra-venta que se realiza a través de internet, sin importar el canal por medio del cual se realice (sea a través de redes sociales, un sitio web, por medio de una laptop o un teléfono inteligente). Esta categoría engloba a conceptos como el m-commerce, el a-commerce y el i-commerce.
M-commerce
Este concepto se puede comprender como el proceso de compra-venta de productos o servicios que sea realiza no sólo por medio digital, sino también a través de un dispositivo móvil, sea este una tableta o un teléfono inteligente.
A-commerce
Conocido también como comercio automatizado, este tipo de proceso de compra-venta se realiza de manera digital, pero se apoya en la utilización de la inteligencia artificial para adquirir de manera automática productos que son usados regularmente por las personas, por lo que tienen que ser adquiridos periódicamente.
I-commerce
El Instant Commerce hace referencia al proceso de compra-venta de productos o servicios que se realiza exclusivamente a través de las redes sociales, sin necesidad de que el cliente tenga que salir de ellas para ir a un sitio web o a una aplicación para concluir el proceso de adquisición.