El proceso de compra-venta, generalmente, en el hogar del prospecto, en el domicilio del vendedor o distribuidor, pero también en lugares como: el centro de trabajo del cliente, una cafetería, locales cedidos para la ocasión, hoteles, salones y cualquier otro sitio, claro, fuera de los locales de retailers.
hay buenas noticias al respecto. De acuerdo a Euromonitor Internacional, la venta directa como modelo de negocio tendrá un crecimiento de 13 por ciento en Latinoamérica en el periodo 2016 a 2021, un incremento superior al repunte mundial que ronda 11.5 por ciento en el mismo lapso.
Asimismo, el reporte de Euromonitor, señala que las empresas de venta directa están dominadas por empresas como Tupperware, Natura, mary Kay, Avon, Herbalife, Amway y Usana, aunque hay pequeños jugadores en el mercado.
Una de las ventajas que presenta la venta directa es su capacidad para aprovechar el poder de las comunidades. De acuerdo con cifras de la firma, la venta directa a escala mundial tendrá un crecimiento anual compuesto por arriba de 2.2 por ciento, mientras que las ventas por Internet crecen cerca de 11.7 por ciento. Además, las regiones con el mayor crecimiento de la venta directa son el Medio Oriente y África, con un alza de 50.7 por ciento en los próximos cinco años, y Asia-Pacífico con 17.9 por ciento.
La venta directa se aprecia cuando se da una explicación o demostración de un vendedor independiente. Por tanto, a esos vendedores, se les conoce como: vendedores directos, distribuidores, representantes, dealers, asesores de belleza o counselors, etcétera.
Finalmente, de acuerdo a el último informe de Euromonitor, el futuro de la venta directa dependerá de que los vendedores directos se adapten a la revolución de las nuevas tecnologías e Internet. Dado que muchas generaciones de jóvenes están más interesados en las compras en línea y albergan escepticismo respecto de las marcas e instituciones más antiguas.