Existen distintas herramientas para darle seguimiento a las ventas y los clientes que tiene una determinada marca, pero también para fortalecer las relaciones entre la firma en cuestión y las personas. Una de ellas es el CRM, una de las principales estrategias de marketing que hay. Debido a la relevancia con la que cuenta es importante conocer cuáles son sus principales características y sus beneficios. Acerca de esto hablamos en las siguientes líneas, de tal manera que abordemos los puntos más importantes al respecto.
Como sucede en todas las estrategias de marketing directo, la principal característica con la que cuenta el CRM es que trabaja con bases de datos. Con información sobre los clientes de una marca, sus ventas, entre muchos otros aspectos, se puede generar uno de esos sistemas de gestión de los shoppers.
El trabajo con las bases de datos del CRM permite que generar una comunicación directa. A diferencia de otras estrategias de marketing, en este caso se habla a un público meta claramente segmentado. Cabe destacar que esto también facilita que el diálogo personalizado entre la marca y la gente.
El CRM no sólo se concentra en la parte de la venta de un determinado producto o servicio, sino que tienen como una de sus principales encomendadas el dar seguimiento a la satisfacción del cliente en la etapa de las posventa.
Al no tratarse de una mera estrategia de venta, sino como una técnica de marketing relacional, esto permite generar una base de clientes fieles y duraderos para las marcas en cuestión. Tanto como característica y como ventaja, esto permite reducir, de cierto modo, el coste por la adquisición de nuevos clientes (hay que recordar que es mucho más costeable conservar a los que ya se tiene que conseguir nuevos).
Para que la estrategia de CRM sea funcional, es importante considerar la salud de la base de datos, la cual debe estar actualizada, sin registros duplicados o falsos.