El aviso de revista es prácticamente una obligación en nuestras campañas de marketing, especialmente porque llega a millones de personas. En los últimos años, existe un problema de creatividad entre los creativos peruanos, así que para generar un poco de inspiración selecciono dos avisos de revista de lo más creativos.
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Vintage Marketing
Si bien no soy un lector empedernido, con frecuencia leo u ojeo diarios y sobretodo revistas. Se encuentran avisos de todo tipo, buenos y malos, con cabeza y sin cabeza. Los avisos buenos por lo general no destacan por la creatividad, sino por el trabajo de los diseñadores gráficos, pero al final no terminan transmitiendo ninguna sensación, ningún estímulo y mucho menos una interacción o impacto en el consumidor. Cabe resaltar que el aviso en revista es fundamental, ya que estarás en los ojos de personas que pueden no conocer tu marca y esta es la oportunidad de capturar un nuevo cliente.
La hoja es cuadrada, pero las ideas no deben serlo. Pensemos fuera de la caja, de ese cuadrado que sin querer queriendo encasilla nuestras ideas y creatividad. Imaginemos. Volemos. Veamos un par de ejemplos:
Peugeot
Peugeot quería dar a conocer su nuevo modelo 406 y su nuevo valor agregado o diferencial: su seguridad. Un anuncio en revista está dentro de su estrategia de medios, pero ellos no querían seguir los clásicos avisos así que pusieron a trabajar a los creativos. De esta manera idearon un anuncio que constó de 2 páginas, una detrás de otra en donde colocaban un círculo en donde el lector y futuro potencial cliente debía golpear. El golpe, activaba un mini airbag que salía del anuncio de la revista. El impacto y la experiencia del lector es máxima, logrando una recordación no del 100% sino del 120%, gran forma de posicionar el producto. De los anuncios de revista que más me han sorprendido.
AXE
La agencia recibió un brief en el que la idea era transmitir que Axe atrae a las mujeres por su olor. El medio para transmitirlo era un aviso de revista. A los creativos les importo poco el diseño, primando más la experiencia e interacción del lector. “Donde hay Axe, hay mujeres” era el slogan de la campaña. La idea consistía en rociar el desodorante sobre la página de la revista en la que únicamente estaba la silueta de un hombre. Mientras más rociabas la página, iban apareciendo siluetas de mujeres al lado del hombre. Simplemente excelente, ya que además de haber una experiencia e impacto, hay un match entre el aviso y el producto; cerrando así el circulo.