Para aquellos que gustan de la absoluta comodidad mientras ven una película, IKEA y la agencia BBDO Instinct, en Moscú decidieron sorprender a los cinéfilos con una ingeniosa acción de marketing de guerrilla.
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Como parte de su campaña “Bedroom Cinema”, la marca convirtió una de las salas de un cine ruso en un auténtico dormitorio, pues quitó las tradicionales butacas y en su lugar colocó 18 camas matrimoniales para que los asistentes vieran la película cómodamente.
Al principio los rostros de los asistentes fue de total sorpresa. Sin embargo, rápidamente se postraron en las camas para presenciar la película y vivir una experiencia de marca.
Te presentamos el video de esta creativa acción BTL.