El mejor vocero de una marca es el cliente mismo. Esa premisa mercadológica se aplica para “Micro Super Awesome Project”, en el que dos jóvenes estudiantes crearon un automóvil a base de medio millón de piezas de Lego.
Sin contar con el financiamiento o patrocinio de la marca juguetera, el australiano Steve Sammatino y el rumano Raúl Oaida desarrollaron el primer automóvil impulsado por aire, cuyo motor, chasis, y carrocería fueron armados en un taller casero con 500 mil Legos.
El video, que fue dado a conocer en YouTube, representa uno de los mejores ejemplos de “fidelidad” a la marca.
Aunque el automovil avanzó menos de 50 metros a 30 km por hora, ha impulsado a los desarrolladores para crear otros proyectos, en el que también emplearán materiales que pueden conseguirse en cualquier tienda.
Les dejamos el video: