Tal vez deberías parar un poco y reflexionar si tu personal no se ha convertido en un problema para tus clientes. Quizá por las actividades del día a día, no te des cuenta de las reacciones que tiene cada una de las personas que integran tu equipo de trabajo, desde el cajero hasta el vendedor porque cumplen con una función fundamental: ofrecer la experiencia de compra al cliente.
La mayoría de los expertos en estrategias de marketing BTL aseguran que la experiencia de compra es una de las máximas que deben perseguir los retailers, si quieren posicionarse como la mejor opción en el mercado. Cabe señalar que en Latinoamérica y Europa los consumidores siguen prefiriendo risa sus compras en tiendas físicas. Por tal motivo es necesario que el servicio al cliente sea uno de los elementos que un retailer trabaje y cuide todos los días a través de sus equipos de trabajo.
Porque para poder diferenciar a un retailer de la competencia es importante que se considere al servicio cliente como uno de los factores que pueden ayudar a lograr este objetivo. Más allá de ser un esfuerzo para atender al cliente y resolver sus dudas en inquietudes, así como sus sugerencias o reclamos. Este servicio ayuda a las compañías a satisfacer de una mejor manera las necesidades y expectativas.
Básicamente, este servicio consiste en atender al cliente de una manera amable, respetuosa y oportuna. Y se debe poner en práctica en cada persona que tiene contacto directo con el cliente, es decir, cajeros, vendedores, promotores, etc.
Si cada persona atiende de una manera adecuada al cliente, esto se traducirá en una experiencia agradable. Por tanto, cuida que tu equipo de trabajo cuente con los conocimientos y habilidades necesarias para ofrecer un servicio al cliente de la mejor manera posible. Capacítalos, proporciona manuales de procesos y brinda el apoyo necesario para que el cliente se sienta satisfecho cada vez que visita el punto de venta.
