El marketing (y particularmente el below the line) cuentan con una gran cantidad de conceptos para definir tanto estrategias, como herramientas e incluso técnicas que son utilizadas para la promoción de un determinado producto o marca, muchos términos que a veces resultan ambiguos o que su cercanía con otros provocan confusiones importantes. El marketing de responsabilidad social es uno de los vocablos sobre lo que recurrentemente hay algunas imprecisiones.
Una de las principales imprecisiones que existe sobre el marketing de responsabilidad social es que se le confunde con el social media marketing, principalmente por el parentesco que tienen sus nombres. Cabe destacar ambos términos muchas veces se abrevian como marketing social, lo cual aumenta la ambigüedad.
Es importante mencionar que otra de las confusiones que existen sobre el marketing de responsabilidad social es que involucra hacer acciones benéficas para incrementar las ventas. Sin embargo, la realidad es considerablemente diferente.
El marketing de responsabilidad social es usado por las fundaciones y organizaciones sin fines de lucro para hacer promoción de las obras benéficas que realizan y que a su vez tenga un impacto considerablemente mayor.
Desde la organización y ejecución de eventos benéficos, relaciones públicas y estrategias para llevar a cabo una acción, son algunas de las actividades que se pueden realizan cuando se trabaja con el marketing de responsabilidad social.
Para el marketing de responsabilidad social la construcción de la confianza con la gente es una pieza fundamental, la cual le permite a las organizaciones y a las fundaciones conectar de manera más genuina con la gente, para que también se sumen a la causa social a la que buscan hacerle frente.
En el marketing de responsabilidad social es importante que todas las marcas trabaje con autenticidad y que vaya acorde a los valores con los que cuenta la empresa.