México es uno de los países que lideran el ecosistema emprendedor de América latina. Las pequeñas y medianas empresas son un pilar importante de la economía mexicana debido a que generan 7 de cada 10 empleos del país, así como el 52 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB).
Sin embargo, los factores que llevan al fracaso a miles de emprendimientos se debe a la falta de habilidades gerenciales, así como la capacitación para llevar las finanzas de la empresa, según datos de la Encuesta Nacional sobre Productividad y Competitividad de las Micro Pequeñas y Medianas Empresas (ENAPROCE) 2018.
Es por eso la importancia de conocer los números de una empresa, y los estados financieros son documentos que permiten conocer de manera puntual el patrimonio neto de una empresa sobre la base de los activos y pasivos, así como los gastos de la empresa los ingresos y presupuesto operativo, según especialistas.
Uno de los estados financieros básicos de las empresas es el balance general, que de acuerdo con las Normas de Información Financiera (NIF), el balance general es emitido tanto por las entidades lucrativas como por las entidades que tienen propósitos no lucrativos, y se conforman básicamente por los siguientes elementos: activos, pasivos y capital contable o patrimonio contable, este último, cuando se trata de entidades con propósitos no lucrativos.
Otro documento clave es el estado de flujo de efectivo y estados de cambio en la situación financiera, se trata de un estado que se conforma por elementos como el origen y aplicación de los recursos.
En tanto, el estado de resultados integral y estado de actividades es un documento que permite conocer los siguientes elementos: ingresos, costos y gastos, así como la utilidad o pérdida neta.
Tener la información con una estructura permitirá conocer si las actividades realizadas en la empresa están rindiendo frutos. En suma, se convierte de una manera más fácil entender la situación actual de una empresa para tomar decisiones sobre el futuro.
Te recomendamos: