Aunque quizá este tema ya sea sumamente conocido para muchos, no está de más revisar qué es lo que se entiende por retail. Principalmente por dos motivos: porque sirve como apoyo para quien no está tan familiarizado con el término y porque a quienes ya estamos más acostumbrados a él, nos permite poder repasarlo e incluso clarificar algunas de las ideas que tenemos respecto a dicho vocablo tan importante en el mundo de la mercadotecnia.
¿Cómo podemos definir al retail?
Lo más posible es que cuando se busque una definición sobre qué es retail nos diga que es el sector económico destinado a las ventas al por menor. De hecho, esa es la traducción literal de lo que es retail: la acción de vender a detalle. Dicho de otro modo, es el ramo donde minorista recibe distintos tipos de productos que serán adquiridos por los clientes en reducidas cantidades. En cambio, con un mayorista el consumidor adquiere grandes cantidades del mismo producto.
Lo verdaderamente interesante de retail son los retailers, o sea, los minoristas que lo conforman. Esto se debe a que puede abarcar una gran cantidad de variedad de negocios, entre los que se encuentra los supermercados, cadenas comerciales, tiendas electrónicas, sucursales bancarias, grandes superficies (sean hiper y megamercados, o comercios especializados), entre otros.
Salvo en las tiendas electrónicas, usualmente el trato entre el retailer y el consumidor es directo. Sin embargo, en todos los casos existe un punto de venta donde se realiza la acción de compra.
Aterricemos esta información en un par de ejemplos. Empresas como Waltmart o Chedraui se surten de una gran variedad de productos (desde alimentos hasta los necesarios para el hogar), los cuales pone a disposición del consumidor para que los elija y los pague en línea de caja.
Otro ejemplo es cuando uno va a una farmacia especializada pediatría. Este punto de venta estará surtido con medicamentos pediátricos y que, al querer comprarse, se paga en caja.