Conductores de Uber en Rusia presentaron su renuncia a la empresa, debido al impuesto a las grandes compañías de tecnología provenientes de Estados Unidos, decretado el año pasado en ese país.
La filial de la compañía de transporte privado en el mercado ruso pidió a sus socios y conductores que soporten la carga financiera que representa el gravamen de 18% que el presidente Vladimir Putin firmó en junio de 2016.
Entre las compañías que están registradas y obligadas a pagar este impuesto están Alphabet (Google), Microsoft, Netflix y la mencionada Uber.
Uber trasladó la carga del impuesto a sus socios y conductores, aunque en un correo electrónico dirigido a ellos indicó que reembolsaría estos cobros, en tanto reiteró que no incrementaría la tarifa para los usuarios de la app.
La pérdida de conductores para la firma estadunidense representa también un retroceso ante su competidor ruso Yander.Taxi, que actualmente es el líder en ese mercado dentro de aplicaciones de transporte privado.
De acuerdo a la Cámara de Comercio de Moscú, Uber tenía alrededor de 3,000 conductores en 2015, por debajo de los 15,000 con los que cuenta Yander.Taxi
Uber consiguió ingresos por 2,060 millones de dólares a nivel mundial durante la primera mitad de 2016, de acuerdo con cifras de Statista.
Por otra parte, en la primera mitad de 2015, gastó 295 millones de dólares en ventas y marketing.